El calor veraniego, la época vacacional que se avecina y la vida social que se incrementa durante estos meses hacen más difícil el seguimiento de nuestra rutina deportiva habitual. Por este motivo, una buena alternativa es sumarse al senderismo, que puede consistir en una actividad lúdica y social al aire libre al mismo tiempo que suple otro tipo de deportes.
Además, salir de excursión no solo quema calorías y mejora la condición física, sino que aporta numerosos beneficios a nuestro bienestar:
1. MEJORA EL ESTADO DE ÁNIMO
Tan solo 30 minutos de paseo pueden ayudar a estimular las sustancias químicas en el cerebro y ayudarte a sentir más relajado y feliz. Hacer senderismo, a largo plazo, también contribuye al aumento de la fuerza y la resistencia muscular, lo que mejora el estado de ánimo e incrementa tu energía diaria.
2. REDUCE LA DEPRESIÓN
Las endorfinas que se liberan durante una caminata provocan sentimientos de felicidad e incluso euforia, ayudando a controlar los niveles de depresión.
3. CALMA LA ANSIEDAD
Las mismas sustancias químicas liberadas durante el ejercicio que ayudan a mejorar el estado de ánimo y tratar la depresión, también pueden hacer maravillas en las personas con problemas de ansiedad. Y es que, el ejercicio regular disminuye la tensión, mejora la calidad del sueño y el estado de ánimo.
4. AUMENTA LA AUTOESTIMA
Practicar senderismo aumenta la confianza en uno mismo, la autoestima y la satisfacción con la vida al tratarse de una actividad saludable en la que se participa también a nivel social.
5. MEJORA LOS RESULTADOS DE TRATAMIENTO
Para las personas que sufren adicciones, actividades como el senderismo pueden mejorar los resultados generales de tratamiento. El cerebro libera una sustancia química llamada dopamina, la cual sustituye las sensaciones que producen el alcohol y las drogas. Además, el senderismo ayuda a las personas con adicciones a conciliar el sueño y recuperar la calidad de vida.
