El municipio gaditano está formado por 6 comarcas en las que encontramos parques naturales como la Bahía de Cádiz, Breña y Marismas del Barbate, Estrecho, Doñana, Los Alcornocales y la Sierra de Grazalema. Además, consta de Parajes y Reservas Naturales compuestas por ríos, embalses, marismas y, entre otras, lagunas. Es una de las provincias de nuestro país en la que, efectivamente, hay que perderse alguna vez.
Con todas estas maravillas, qué menos que aprovechar para hacer algo de turismo activo, dejarse embriagar por sus paisajes naturales y renunciar, aunque sea por unas horas, a nuestras mundanas rutinas.
Rutas a caballo
Una de las propuestas que, verdaderamente es la más recomendable, es la de recorrer el encanto de la Bahía de Cádiz a lomos de un caballo. Una experiencia digna de aquellas personas a las que les guste la naturaleza y quieran adentrarse en mitad de la bahía con uno de los animales más nobles que se conocen. Hay varios centros hípicos en Cádiz que hacen excursiones a caballo.
Pero si ahora no es el momento de viajar a Cádiz, por favor, no pierdas la oportunidad de escaparte en verano y realizar ahí esta actividad: se pueden hacer rutas en la playa e incluso avanzar mar adentro y vivir la experiencia de cómo un animal tan grande es capaz de nadar.
Senderismo
Otra de las opciones es la de ir a pie por el alguno de los Parques Naturales que se encuentran en la provincia. Un guía de montaña acompaña al grupo y realiza sendas paradas durante el itinerario, dando todos los detalles sobre la región, la flora y la fauna que en ella habitan, cuáles son los puntos más representativos del paisaje…
Puede ser uno de los modos más gratificantes de conocer los espacios naturales de la zona y hay rutas para cualquier tipo de persona, ya sea deportista habitual o simplemente sienta la apetencia de pasear al aire libre. A las rutas de senderismo también les puede acompañar una ruta gastronómica, ornitológica o cultural.
Enoturismo
Y para saborear y disfrutar de los aromas gaditanos no habrá mejor opción que la de llevar a cabo una visita enoturística. Un recorrido por diversas bodegas que se encuentran en Jerez de la Frontera, Sanlúcar de Barrameda o Arcos de la Frontera donde se puede aprender desde cómo se cultivan y mantienen los viñedos hasta cuál es el proceso de elaboración del vino para llegar al público directo.
Es como desvelar un misterio, como saber que, como por arte de magia, lo que a tu llegada era una uva recién recogida del viñedo, al pasar por todo un proceso estudiado a través de los años, pasa a ser un conjunto de colores, sabores y aromas que te embargarán al acercarte la copa a los labios.
Paramotor
Pero si hay algo realmente mágico aquí es experimentar en primera persona lo que es volar como un ave. Esa sensación de libertad, de tranquilidad, de saber que en ese momento no importan nada más que tú, la suave brisa y el paisaje que se abre paso bajo tus pies… Todo ello se puede conseguir gracias a un vuelo biplaza en paramotor.
Un instructor va junto al participante y en todo momento hay comunicación entre ambos, ya que se cuenta con un casco que lleva instalado un equipo de auriculares/micrófono incorporado con el que se puede hablar durante el vuelo. Se realizará sobre la Sierra de Cádiz, muy cerca de Algodonales, donde se divisan paisajes únicos con alcornocales, madroños, herrerillos, cabras montesas, búhos reales o ciervos como habitantes.
Quads
Y por último pero no por ello menos divertido, otra de las actividades de ocio que se puede hacer aquí es la de conducir quads en plena montaña. Rutas de una hora, de dos o de media jornada que se convierten en las perfectas aliadas contra el estrés diario.
No es necesaria ninguna experiencia para conducirlo, simplemente seguir las normas de seguridad establecidas y tener bien claro cuáles son los principales mandos del vehículo, como el acelerador, el freno o el cambio de marchas (si el quad no es automático). Una de las ventajas es que se puede optar por ir solo o por compartir vehículo, ya que dispone de dos plazas.
Tras estas opciones recomendadas también te animamos a que, por supuesto y sólo si tienes ganas, saques un hueco para echar un vistazo a los carnavales gaditanos. Sus gentes, sus tradiciones, su gastronomía… Infinitamente recomendable.