El Parque Natural del Montseny está situado entre las comarcas del Vallés, Osona y La Selva, ocupando las provincias de Barcelona y Gerona. Es uno de los espacios naturales españoles con más riqueza y el más antiguo de Cataluña. A tan sólo 50 kilómetros de Barcelona y con más de 30.000 hectáreas se ha convertido en uno de los paraísos catalanes a la hora de practicar turismo activo.
Dadas las grandes diferencias, tanto de altura como de clima, la vegetación que se encuentra a lo largo de todo el parque es completamente diferente en unos puntos y en otros. En las partes más bajas se pueden hallar encinares, pinares y alcornocales pero por encima de los 1.000 metros tropezamos con hayas, matorrales o abetos. Esto hace que la riqueza paisajística sea el reclamo principal para los amantes de la naturaleza que acuden aquí cada año.
Y si te gustan los animales aquí habitan especies de todo tipo, como zorros, lirones, jinetas, reptiles, anfibios… Un espectáculo que no te puedes perder.
Declarado Reserva de la Biosfera por la UNESCO es el sitio perfecto para conseguir ese punto de relax y conexión con la naturaleza que te hace falta. Algunas de las hípicas que están en Barcelona llevan a sus clientes a este lugar, pues es de los más demandados. Puedes ampliar información sobre los centros de equitación en Barcelona en este listado.
¿Hace falta tener experiencia previa?
Si no tienes experiencia previa no hay de qué preocuparse, ya que habrá un jinete experto que se ocupará de darte todas las instrucciones necesarias. Aprenderás cómo subirte al caballo, cómo manejar las riendas, cómo guiar al animal para que avance, pare o gire…
Los caballos son unos de los animales más inteligentes que existen y en seguida sabrán si estás a gusto sobre sus lomos o si tienes algo de miedo. Tranquilo, pues a pesar de su gran tamaño son muy nobles y no te harán nada. Además están acostumbrados al trato continuo con adultos y niños.
Si nunca has montado a caballo es aconsejable que hagas una ruta sencilla de 1 hora o de 1 hora y media, pues si fuera más larga probablemente acabarías cansándote mucho y no disfrutarías de la excursión. Pero si ya has hecho esta actividad alguna vez te aconsejamos que optes por los paseos de media jornada o de jornada entera.
Para empezar darás un paseo por terrenos totalmente llanos que no entrañan ningún tipo de dificultad para más adelante adentrarte por bosques, montañas y ríos que habrá que cruzar. Puede montar a caballo cualquier persona que no supere un peso de 95 kilos y siempre y cuando sea mayor de 15 años.
A lo largo del recorrido el guía transmitirá sus conocimientos sobre el parque así como sobre el mundo de la equitación, haciendo la experiencia aún más amena e interesante. Todo el grupo irá parando en algunos momentos para que podáis hacer fotos, observar la naturaleza y descansar.
Si se opta por una ruta de una duración mayor, se podrá parar a comer, incluso hay algún centro que te lleva hasta un restaurante a 750 metros de altura con el que se podrán degustar platos típicos de la gastronomía catalana.
Ideal para cualquier ocasión
Los paseos a caballo se pueden adaptar a todo tipo de ocasiones, aunque mucha gente opta por disfrutarla en pareja. Puede ser la escapada perfecta para salir de la monotonía y de los planes de siempre. También se puede practicar con los amigos o aprovechar para hacer un regalo original o para vivir algo diferente con la familia.
Si tienes niños pequeños puedes optar por dar con ellos una vuelta en pony aunque, eso sí, ésta se llevará a cabo en caminos cercanos a las diferentes hípicas de la zona, ya que los tramos son más fáciles.
Es recomendable llevar pantalón largo (aun en verano) y calzado que sujete bien el pie para evitar perderlo durante el paseo, pues en función de lo que pida el grupo y de las condiciones se podrá trotar o incluso galopar.
