Jaime Castellanos ha presentado su dimisión como consejero del Grupo Vocento. El empresario, investigado por la policía por el pago de 6 millones de euros a Rodrigo Rato en 2011 a través del banco Lazard, ha renunciado su puesto en la compañía de medios de comunicación, para la que se postuló como presidente, sin éxito, tras la salida de Rodrigo Echenique en febrero de 2015 y en la que había perdido el interés en los últimos meses, según precisan fuentes internas.
El empresario, poseedor del 4% de las acciones de la empresa a través de Casgo S.A., comunicó este lunes su decisión al Consejo de Administración de la editora de ABC. La noticia no fue sorpresiva, ya que desde el nombramiento de Santiago Bergareche, Castellanos había mostrado "una clara desidia" con Vocento "y ni siquiera asistía a las reuniones" del máximo órgano de dirección del grupo, detallan los mismos informantes.
La duda que se plantea ahora es si Castellanos pondrá a la venta su participación en la empresa. De confirmarse este supuesto, seguirá el mismo camino emprendido por Víctor Urrutia, que en diciembre se deshizo del 10% de las acciones. Ambos formaron parte del grupo de consejeros rebeldes que en 2012 pidió mediante un requerimiento notarial la convocatoria de una Junta Extraordinaria para cesar a todos los miembros del principal órgano de gobierno de la compañía ante la grave crisis que atravesaba la empresa.
Los sublevados, entre los que se encontraban Manuel Jové, Félix Revuelta y su actual presidente, Santiago Bergareche, exigieron -y consiguieron- que se redujera el número de miembros del Consejo de Administración (de 16 a 12), que aumentara la presencia de consejeros independientes y que se ratificara como CEO a Luis Enríquez.
Venta de Recoletos a Unidad Editorial
El cónyuge de Patricia O’Shea estuvo al frente del Grupo Recoletos (propietario de Marca y Expansión) y fue el que rubricó su venta a Unidad Editorial (RCS MediaGroup) en 2007 por una suma que ascendió a 1.100 millones de euros, con el apoyo financiero de un Banesto entonces comandado por Ana Patricia Botín. De esa operación quedó al margen el diario gratuito Qué!, que pocos meses después fue transferido a Vocento por la desmedida cantidad de 132 millones de euros.
La gestión de Castellanos en Recoletos contó con luces y sombras. Entre estas últimas se puede situar su OPA a Pearson para la compra del 100 % de la compañía por un precio un 40 % inferior al de su salida a bolsa cuatro años antes. Este movimiento fue extremadamente perjudicial para sus accionistas más antiguos, entre los que se encontraban los propios empleados del grupo, quienes adquirieron los títulos -incentivados por los altos cargos de la empresa-, en unas condiciones que les hicieron perder una buena parte de su dinero meses después. En su día, llegaron a definirse como “estafados” por figuras como Castellanos.
Fuentes de Vocento han incidido en que la figura de Jaime Castellanos despertaba recelos entre una parte del Consejo de Administración -principalmente, entre los Ybarra-, debido a su relación con el caso Lazard. A finales de 2014, el juez Andreu reclamó a este banco que le proporcionaran toda la información que tuviera en su poder sobre el supuesto pago de más de 6 millones de euros a Rodrigo Rato cuando encabezaba Bankia en 2011, a través de cinco contratos que se encuentran a examen.
Con la marcha de Castellanos, el Consejo de Administración de Vocento queda conformado por Santiago Bergareche (presidente), Luis Enríquez (consejero delegado), Ignacio Ybarra (Mezouna S.L.), Álvaro de Ybarra (Onchena S.L.), Soledad Luca de Tena (Valjarafe S.L.), Gonzalo Soto (independiente), Miguel Antoñanzas (independiente) y Fernando Azaola (independiente).