Un caos casi inexplicable. Así puede definirse la futura implantación del dividendo digital, nombre con que se conoce al proceso de liberalización del espacio radioeléctrico para que pueda utilizarse la tecnología 4G de telefonía móvil. Este proceso tiene que estar finalizado antes del 1 de enero de 2015, por órdenes de la Comisión Europea. En España los actores implicados en el asunto dudan que exista tiempo suficiente y reclaman al Gobierno que acometa un plan de actuación que cuente con el consenso del sector. De momento, lo único seguro es que miles y miles de usuarios tendrán que pagar una media de 20 euros a los antenistas que tendrán que acudir a sus viviendas para resintonizar sus aparatos de la Televisión Digital Terrestre (TDT).
En román paladino, los canales de TDT deben dejar espacio para que las telecos puedan explotar y los usuarios puedan disfrutar la 4G, una tecnología de nevegación mucho más rápida
El espacio radioeléctrico es limitado. Y el famoso dividendo digital conlleva la migración de la emisión de las televisiones hacia otras bandas del espectro para dejar libres esas que utilizarán las operadoras para ofrecer el 4G. En román paladino, los canales de TDT deben dejar espacio para que las telecos puedan explotar y los usuarios puedan disfrutar una tecnología que permite una velocidad de navegación muchísimo más rápida. Por ello, los técnicos tendrán que visitar las viviendas de los usuarios para resintonizar sus aparatos de la TDT. Sí, esos mismos aparatos que se instalaron años atrás, en la transición de la televisión analógica a la televisión digital.
Los expertos calculan que los usuarios pagarán más de 500 millones de euros en total por este cambio tecnológico, pero es solo una estimación que puede quedarse corta
No todos los hogares tendrán que pasar por este trance. Como el Ejecutivo no ha aclarado cómo piensa implantar el famoso dividendo digital, no está claro a quiénes afectará y en qué medida este cambio. Pero, eso sí, ya es seguro, según fuentes del sector, que al menos 1,3 millones de edificios tendrán que pasar por ello. El cálculo más aproximado que ahora mismo existe según los expertos es que en cada hogar afectado se deberá pagar entre 20 y 23 euros a los antenistas que visiten su domicilio. La cifra total que costaría a los usuarios se situaría en más de 500 millones de euros. Se trata solo de una estimación que ni quienes se ocuparán de la instalación están en condiciones de aclarar. O sea, el caos puro y duro.
Una predicción de risa
Y es que ni siquiera ahora mismo es seguro que los antenistas tengan que acudir solo una vez a las viviendas para resintonizar los aparatos. Existe la posibilidad de que no todos los canales se resintonicen al mismo tiempo. Si el Ejecutivo opta por resintonizar los canales en varias fases (por ejemplo: primero los privados y luego los públicos), los instaladores tendrían que acudir al menos dos veces a casa de los usuarios. Todo depende, por tanto, de que el Ministerio de Industria haga público cómo pretende llevar a cabo este cambio capital para poder ver la televisión. Cambio que, dicho sea de paso, el departamento de José Manuel Soria pretendía implantar antes del 1 de enero de 2014. Una predicción que ahora mismo suena a risa.
Esta misma semana, la patronal de las televisiones privadas, Uteca, la Federación Nacional de Instaladores e Integradores de Telecomunicaciones (Fenitel), y la empresa Abertis mantuvieron un encuentro con los medios de comunicación. Y todos sus representantes, Andrés Armas (televisiones), Miguel Ángel Gacía Argüelles (antenistas) y Josep Ventosa (Abertis), coincidieron en señalar que existe poco tiempo para que se instale el dividendo digital en los plazos que dicta Bruselas. Hace falta un plan consensuado y puesto en marcha cuanto antes. Por ello, insistieron en urgir al Gobierno del PP a tomar cartas en el asunto. Además, Armas, director general de Uteca, remarcó la necesidad de un blindaje jurídico para que no se pierdan otros ocho canales de TDT.
Los canales de TDT, otra historia
Pero este asunto, el de la desaparición de canales de TDT, constituye otra historia que, al contrario de lo que ha venido defendiendo el Ministerio de Industria, no guarda directa relación con la implantación de la nueva tecnología. Es decir, ahora en la TDT hay 24 canales y, si no hay cambios de última hora, después del próximo martes, 6 de mayo, habrá solo 15 canales. Pero, con 24 o con 15, la resintonización resulta necesaria. Aunque, como dijo el representante de las televisiones, "seria trágico que, después de este nuevo desembolso, los espectadores se vieran al cabo de un tiempo con que lo han hecho para tener una oferta de 15 canales en abierto y de nuevo, esa oferta reducida". Una posibilidad aún más caótica.