Tras la polvareda levantada por el 'caso Zapata', el concejal de Ahora Madrid en el Ayuntamiento, Guillermo Zapata, se ve de nuevo envuelto en la polémica por sus manifestaciones en la red social Twitter. Concretamente por comparar la banalidad del mal en el nazismo con la del gobierno alemán actual, en referencia a un artículo de opinión titulado 'La banalidad alemana', de Gerardo Tecé.
Tras la publicación de este tuit, Zapata ha terminado por eliminarlo, dado que, según él, se estaba "empezando a usar con un sentido diferente al que yo entiendo que tiene el texto". A continuación, aclara que: "Para mí no es un texto que compare el nazismo con ninguna otra cosa, sino que habla de cómo se tecnifica la crueldad y el sufrimiento".
Para mi no es un texto que compare el nazismo con ninguna otra cosa sino que habla de como se tecnifica la crueldad y el sufrimiento.
— Guillermo Zapata. (@gzapatamadrid) July 18, 2015
Borro el tuit con el texto de @gerardotc Se está empezando a usar con un sentido diferente al que yo entiendo que tiene el texto.
— Guillermo Zapata. (@gzapatamadrid) July 18, 2015
La polémica de los tuits
El concejal de Ahora Madrid reprodujo chistes en su cuenta de Twitter como el siguiente: "¿Cómo meterías a cinco millones de judíos en un 600? En el cenicero". En junio de 2014, escribió: "se confirma que ETA además de criminal era idiota, con la cantidad de simpatizantes y aliados que tenía no fue capaz de tomar el poder". En 2011 publicaba chistes con las víctimas del terrorismo: "Han tenido que cerrar el cementerio de las niñas de Alcàsser para que no vaya Irene Villa a por repuestos".
Para la fiscal, estos comentarios eran constitutivos de un delito de humillación a las víctimas del terrorismo, penado con hasta dos años de cárcel, por ser "objetivamente vejatorio y humillante para la destinataria víctima del terrorismo, en particular, y en general para todas las víctimas que de una forma u otra lo han sido del terrorismo de la organización terrorista ETA".
Sin embargo, el juez de la Audiencia Nacional Santiago Pedraz acordaba el archivo de la querella presentada por Dignidad y Justicia contra el concejal, después de que Irene Villa le exculpara en un escrito presentado en el juzgado. El juez consideraba que era "de todo imposible incardinar" la conducta del concejal "en precepto penal alguno". Pero la Fiscalía no quedó satisfecha con la decisión y decidió recurrir esta sentencia ante la sección segunda de la Sala de lo Penal.
Zapata dimitió como concejal de Cultura -aunque conserva su asiento en el Ayuntamiento de Madrid como concejal del distrito de Fuencarral- para no condicionar al gobierno encabezado por Manuela Carmena. Pidió además perdón por el daño que sus comentarios pudieran haber causado, asegurando que no es antisemita, que siempre ha rechazado la violencia, y afirmó que había contactado con los afectados por sus "bromas" y que remitiría cartas a los principales señalados, como la comunidad judía.