El presidente de Radiotelevisión Española ha rechazado este miércoles de forma tajante iniciar una investigación interna para esclarecer quién es la redactora a la que Ignacio González colocó –supuestamente- en Torrespaña para que informara a su favor. José Antonio Sánchez se ha opuesto a que el Consejo de Administración de la corporación debata y vote esta iniciativa pues, en su opinión, esta labor pesquisidora le corresponde al juez.
En el auto sobre el caso Lezo, el juez Eloy Velasco asegura que el expresidente de la Comunidad de Madrid “habría colocado a una periodista de su confianza en RTVE para que defendiese su imagen y sus intereses”. A la vista de esta hipótesis, el consejero Miguel Ángel Sacaluga ha pedido este miércoles a José Antonio Sánchez, sin éxito, que abra una investigación para determinar quién es el ‘topo’ de Ignacio González en la corporación.
Previamente a Sacaluga, el Consejo de Informativos de Televisión Española había solicitado explicaciones al respecto al director de los telediarios, José Antonio Álvarez Gundín. En su respuesta, el responsable aseguró ignorar a quién se refiere el auto judicial e incidió en que su trabajo pasa por “velar por la independencia y la pluralidad” de RTVE; y no por “colocar” a nadie a dedo.
No hay que olvidar que José Antonio Sánchez –cuyo nombre figura en los papeles de Luis Bárcenas- ejerció de director general de Telemadrid a la vez que Ignacio González era presidente de la Comunidad. Durante su etapa al frente de la radio-televisión pública madrileña, se tramitó un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) que supuso la salida de 861 efectivos de su plantilla.
La negativa a investigar quién es la periodista que aterrizó en RTVE de la mano del presunto cabecilla de la trama del Canal de Isabel II ha provocado un significativo malestar entre los miembros del Consejo de Administración más críticos con la gestión de Sánchez, que son minoría, dado que los consejeros afines al Partido Popular ocupan seis de los nueve puestos.
ETA, Venezuela y Gürtel
Durante la reunión del Consejo celebrada este miércoles también se ha abordado la situación de los Servicios Informativos de RTVE, cuya credibilidad ha vuelto a ser puesta en entredicho recientemente por el Consejo de Informativos de la corporación, a raíz del tratamiento que han realizado de acontecimientos como la citación a declarar de Mariano Rajoy o el desarme de ETA. Sobre este último punto, este órgano criticó que la noticia de la entrega de las armas por parte de la banda terrorista se ofreciera el pasado 8 de abril, en el Telediario 1, por detrás de otras relacionadas con la guerra de Siria, el atentado de Estocolmo o la crisis política de Venezuela.
Según han explicado fuentes cercanas al Consejo, el presidente de RTVE ha definido como “ejemplar” la labor de los Servicios Informativos de la corporación, en consonancia a lo que expuso durante sus dos últimas comparecencias ante la Comisión Mixta Interparlamentaria de control de la radio-televisión pública.
Sin ir más lejos, el pasado 9 de marzo defendió la independencia de los telediarios y negó la existencia de una redacción paralela en Torrespaña que se encargue de defender los intereses del Gobierno y del Partido Popular. “Con Carmen Caffarel se firmaron 77 contratos, con Luis Fernández, 65, con Alberto Oliart, 98. En mi época, 59 (…). Hacer cambios en determinadas épocas garantizaba la pluralidad. ¿Ahora no? Bueno, qué le vamos a hacer”, zanjó.
A lo que sí ha accedido el presidente de RTVE, a propuesta de Sacaluga, es a estudiar la puesta en marcha de un observatorio de igualdad en la corporación que vele por que se cumpla la ley a este respecto en su seno.
