De entrada podríamos pensar que los famosos son mejores que nosotros, pero gracias a dios, no siempre es así. Con la llegada del calor estival, la mayoría de celebrities empiezan a programar sus largas vacaciones de verano. Que si Ibiza, que si Marbella, que si el Caribe, que si un crucero en yate privado, todo les viene bien con tal de lucir los cuerpos que han estado cultivando a lo largo del invierno. Pero no pensemos que todos han conseguido un tipo como el de Giselle Bundchen o Andrés Velencoso, ya que la realidad para algunos famosos es muy distinta.
Flavio Briatore
A Flavio Briatore le encanta pasearse por la playa acompañado de mujeres jóvenes y guapas, seguramente para desviar la atención de su cuerpo nada armonioso. Briatore es uno de esos hombres que con la edad deciden entregarse a los placeres de la comida y disimulan la calvicie dejándose el pelo largo. Vamos, un despropósito en bañador. Aun así, el empresario no se pierde unas vacaciones en la playa. Aunque viéndole, parece mentira que haya estado toda la vida rodeado de deportistas...
Terelu Campos
Terelu fue una joven guapa, atractiva y delgada que tenía conquistados a todos los telespectadores de Telemadrid. La hija de María Teresa Campos paseaba con pantalones ajustados y tops y se convirtió en la favorita de los profesionales del volante. Pero de eso hace mucho y Terelu ya no es lo que era. Ahora la colaboradora acude a la playa tapada con una túnica y, encima, se baña con ella. Todo para que los paparazzi no le hagan fotografías. ¿Y no sería más lógico quedarse en casa? O asumir que los años y los quilos pasan factura.
Donatella Versace
A Donatella Versace le gusta estar muy morena, mucho, casi chamuscada, así que no puede perderse un verano al sol -aunque ella mantiene el moreno intenso todo el año-. Pero además, a la diseñadora le gusta estar muy delgada, muy rubia y muy desnuda, con lo que sus paseos en bikini cual momia con peluca platino son un clásico. Lo peor es que su hija Allegra ha cogido el mismo ritmo que su madre y a sus 27 años parecen hermanas.
Alanis Morissette
La cantante Alanis Morissette hace mucho que no tiene un éxito como le ocurrió en los 90, así que debe de pensar que ya nadie se acuerda de ella y que no importa el estilismo que elija para acudir a la playa. Aunque claro, también hace mucho tiempo que ha perdido la figura, la gracia y hasta el brillo del pelo. Parece que Alanis todavía no se ha recuperado de que Ryan Reynolds la dejara por Scarlett Johansson y decidió sublimarse con la comida. Mala decisión.
Paulina Rubio
La chica dorada hace mucho que dejó de ser aquel sex symbol que conquistó el mundo. Paulina Rubio se cansó de la esclavitud que supone ser una estrella y decidió apostar por un aspecto más natural, el problema es que se le fue la mano. Y, por si faltaba algo, se quedó embarazada y no consiguió recuperarse tan milagrosamente como otras famosas. El resultado, un físico muy alejado de aquel que estábamos acostumbrados a ver en los escenarios, con minishorts y vestidos ajustados. Dentro de poco conseguirá parecer más vieja que su propia madre, la actriz Susana Dosamantes.
Estefanía de Mónaco
Estefanía de Mónaco no pasa por un buen momento. Alejada de la vida pública, de su familia y de casi todos los actos oficiales relacionados con el Principado, la más rebelde de las princesas se dedica a cuidar a sus animales y a sus hijos. Estefanía ha perdido su juventud, su cuerpo atlético y el ánimo con el que se enfrentaba a la vida. Aunque como la que tuvo, retuvo, le aconsejamos unos tratamientos faciales como los de su hermana Carolina y en dos días, como nueva.
Roberto Cavalli
El diseñador Roberto Cavalli no tiene suficiente con torturarnos con algunos de sus diseños, sino que, además, se empeña en hacerlo cada verano desde la playa. Cavalli, que ya ha cumplido los 73, es un adicto al bronceado, a esconder tripa -como si pueda hacer algo al respecto-, a la cirugía y a los minibañadores que no dejan nada, pero nada, a la imaginación. Y, además, aprovecha para cambiárselos en público, sobre todo si hay fotógrafos cerca. ¿Tendrá mucho por lo que presumir?
Kiko Rivera
Kiko Rivera es un imán para las mujeres. Y viendo su físico, está claro que el secreto está en la cuenta corriente. Kiko es un hombre sin complejos. Le encanta pasear sin camiseta, dejar al aire todo es cuerpo que la naturaleza le ha dado y si encima puede ganar algo de dinero con ello, no se lo piensa dos veces. Ya pudimos verle prácticamente desnudo en Supervivientes 2011 y todavía no nos hemos repuesto del susto.
Jorge Javier Vázquez
¿Recuerdan aquellas imágenes de Jorge Javier Vázquez en la playa donde parecía Jesús Gil? Pues esta semana, otra revista del corazón ha decidido sacarle en portada y, sí, el presentador ha mejorado, pero no tanto como él cree. Jorge Javier piensa que tiene el cuerpo de un jovencito, firme y musculoso, cuando lo que nosotros vemos es el de un hombre de cierta edad y no precisamente la que el presentador debe de tener. ¡Qué dura es la prueba del bañador!
Paula Vázquez
La presentadora Paula Vázquez ha sido una de las mujeres a las que mejor le han quedado los bikinis. Durante su etapa como conductora de La isla de los famosos, Vázquez popularizó tanto su imagen en bikini que llegó a lanzar su propia línea de diseños. Pero la vuelta de la isla no le vino nada bien. La presentadora ha aparecido tan delgada últimamente que saltaron todas las alarmas. Vázquez trató de quitar importancia, pero las imágenes hablaban por sí mismas.
Pierce Brosnan
Hace doce años, Pierce Brosnan dejó de ser James Bond para pasarle el testigo a Daniel Craig y viendo cómo ha evolucionado el actor, tenemos serias dudas que realmente pudiera interpretar al agente secreto más famoso de todos los tiempos. Brosnan se ha ido aproximando a la jubilación al mismo ritmo que su estómago se ha ido expandiendo. Pero no se preocupen, su esposa, Keely Shaye Smith, ha aumentado al mismo ritmo y ahora forman una adorable pareja de gorditos.
Cayetana de Alba
Cuando uno piensa en verano, vacaciones y playa, lo primero que le viene a la cabeza es la imagen de la duquesa de Alba en bikini. Para doña Cayetana no hay límite de edad para disfrutar del sol y la tranquilidad de las olas del mar. Y como la duquesa otra cosa no, pero coqueta es un rato, prefiere utilizar bikini para tener menos marcas del sol. Cosa distinta es que el resto de mortales queramos ver a una señora de 90 años en bikini, pero eso es problema nuestro, no suyo, claro.