Se ha ganado a pulso una fama de rebelde (hay quien dice que incluso de macarra), pero parece que pasar un año internado en un estricto colegio ha servido para que Felipe Juan Froilán de Marichalar Borbón enderece su errático rumbo educativo. El hijo mayor de la infanta Elena y Jaime de Marichalar ha conseguido sacar adelante el año académico en el colegio episcopal Sagrada Familia de Sigüenza, según informa este lunes el diario Abc.
El joven, que cumplirá 17 años esta misma semana, ha cursado 4º de la ESO en este estricto centro después de un rumbo errático en los estudios y tras un curso veraniego realizado durante el verano del año pasado. Tras este coaching estival, sus padres decidieron continuar apostando por el centro al comprobar que sus métodos podrían servir para evitar que el nieto mayor del rey Juan Carlos volviera a repetir un curso (ya repitió una vez 2º de Secundaria).
El sacrificio y la austeridad que son seña del centro y su estricto código de conducta parecen haber hecho mella en la personalidad del joven, a quien aun así hemos visto repetir durante este tiempo algunos incidentes polémicos (como el caso de los insultos xenófobos proferidos en el Parque de Atracciones de Madrid). Sin embargo, en lo académico todo ha sido mucho más positivo que otros años y de hecho sus padres se plantean que continúe en el centro para que no se desvíe de este rumbo, de acuerdo con la información de Abc. La atenta vigilancia del director general del centro, que ha actuado también como tutor del joven Borbón, parece haber contribuido a este cambio.
De todos modos, puede que el amor también haya logrado atemperar su carácter. Al parecer, durante su estancia en el colegio habría entablado una ‘entrañable amistad’ con una compañera con quien se la ha podido comprando las típicas meriendas adolescentes en las tiendas cercanas al centro. Ella misma ha hablado sin tapujos sobre su relación a través de la red social Ask.fm, que permite a los usuarios hacerse preguntas directas. Gracias a eso sabemos que este 13 de julio cumplen 4 meses desde el comienzo de su relación y que parecen muy felices: “Es lo mejor que me ha pasado en la vida, me pierdo con él, me quiere muchísimo y yo a él más. Me quita la tristeza con solo mirarme”.
