No podemos evitarlo. Nos encanta Terelu -¿lo habían notado?-. Estamos enganchados a su vida como si de un culebrón de sobremesa se tratase. Nos fascina su forma de nadar y guardar la ropa, de decir que no es personaje y serlo igualmente, de sacar a su hija en las revistas y no en televisión, de desmentir una ruptura y confirmarla a los pocos meses, de decir que quiere dar la exclusiva en su programa y hacerlo en portada al día siguiente. ¿No nos digan que no es para quererla hasta no poder más?
Terelu es pura España. Quiere adelgazar y no puede, quiere ser jet set y trabaja en Sálvame, quiere desvincularse profesionalmente de su madre y lleva a sus faldas toda la vida. ¿Quién no ha pecado de incoherencia de vez en cuando?
Ahora nuestra musa está soltera. Ya lo adelantó la revista Lecturas hace unos meses y, pese a que se encargó de desmentirlo, parece que el tiempo nos ha dado la razón. Y no crean que está muy afectada, que al día siguiente de confirmarlo a través de su revista de cabecera -¡Hola!, claro- se marchó a cenar y pasarlo pipa con unas amigas.
¿Está prohibido? Claro que no. Pero si lo haces en el restaurante donde vas siempre y con la puerta atestada de fotógrafos, sabes a lo que vas. '¿A qué? ¿a qué?' Pues a darle en los morros a tu ex, para que vea lo que se está perdiendo. ¡Como haríamos todos! ¿Ven? Terelu es humana, como usted y como yo, pero con mejor casa y mejor sueldo. Y ella que puede, tiene que aprovechar la soltería.
Por los brazos de la colaboradora han pasado empresarios, pilotos, toreros y boxeadores. Un plantel nada desdeñable de amores para una de las solteras de oro del país. Seguro que recuerdan a más de uno, pero para que no se les quede nada en el tintero, vamos a hacer un repaso pormenorizado de su lista de ex -al menos de la que tenemos noticia, que seguro que se ha guardado alguno para sus memorias-. Terelu, este es tu noviómetro:
El cámara que no cumplió su misión: Miguel Ángel Polvorinos
El primer novio conocido de Terelu fue Miguel Ángel Polvorinos, un cámara de TVE al que conoció cuando también trabajaba en la cadena pública. Se enamoraron, estuvieron que si sí que si no durante seis años y finalmente se casaron en 1992. Terelu estaba ilusionadísima pero la cosa no pudo llegar a buen puerto. Ella quería formar una familia y con Polvorinos no pudo ser. A los cuatro años, decidieron separarse.
Un torero que no falte: Martín Pareja-Obregón
Después de la separación de su primer marido, Terelu volvió a la soltería con energías renovadas. Las revistas, rápidamente, comenzaron a adjudicarle romances con toreros, que para algo es ella muy aficionada. Sonaron nombres como Rafi Camino -desmentido por ella misma muchos años después- y Martín Pareja-Obregón, que fue el que se llevó el gato al agua. Acudieron a algunas fiestas, pasaron juntos las vacaciones pero, mira, no. Se acabó en un suspiro.
La folclórica y el empresario: Alejandro Rubio
Que María Teresa Campos se empeñe en cantar en todos sus programas la convierte, por méritos propios, en una folclórica. Y a Terelu, de rebote, también. La presentadora conoció al que sería el hombre de su vida a finales de los 90. Con el empresario Alejandro Rubio se casó en 1998, tuvo a su hija dos después y a los cinco ya se divorciaron. Eso sí, no ha perdido contacto con él y se ven regularmente. Terelu sabe cómo romper con elegancia y serenidad.
El rey del 'pim-pam': Pipi Estrada
¡Qué poco imaginaba Terelu lo que le esperaba con Pipi Estrada! Comenzaron a salir muy poco después del fin de su segundo matrimonio y se convirtieron en la principal atracción de los paparazzis. Su ya mítico baile con tocamientos, bautizado como 'pim-pam' por Aquí hay tomate, pasará a la historia de la televisión. Y no quedó ahí la cosa. Pipi se dedicó a contar sus encuentros sexuales con la presentadora en Interviú -algo que le costó caro-, cambió a Terelu por la ex actriz porno Miriam Sánchez y acabó propulsado de Telecinco por un asunto de ligues y citas en Mujeres y hombres y viceversa.
El hombre silencioso: Carlos Agrelo
La relación entre Terelu y el empresario Carlos Agrelo duró poco y supimos menos. Atractivo no era, pero seguro que tenía un sentido del humor apasionante. ¿Tenemos que decir algo más o podemos pasar ya al siguiente? ¡Next!
El amante despechado: Celso García
'La citada señorita'. Así decidió referirse a la que había sido su pareja el empresario Celso García después de su ruptura. No sabemos si se quisieron mucho -seguro que sí-, pero lo que tenemos claro es que no acabaron precisamente bien. El empresario fue el encargado de confirmar la relación a la prensa y también de desquitarse emitiendo un comunicado final donde dejaba a Terelu no demasiado bien. Tres meses y diez días aseguró que había durado su relación y que fue él quien se personó en casa de su novia para anunciar el fin del romance. Ahí, castigador.
El 'toy boy' de la Campos: Salvador Pérez
Harta ya de tanto empresario y tanto señor rancio, Terelu decidió hacerse un Madonna y comenzó a salir con Salvador Pérez, un abogado dieciséis años menor que ella. Y como la cantante, tampoco le funcionó. El asunto de los toy boys nunca suele salir del todo bien -miren a Jennifer Lopez-, pero, ¿y la alegría que se llevan al cuerpo? Igual ahora debería volver a intentarlo. Por probar y eso.
Aterrízame como puedas: Carlos Pombo
El novio de Terelu por excelencia. Parece que su relación duró una década, pero lo cierto es que fueron un par de años. El piloto Carlos Pombo conoció a la colaboradora unos meses antes de que le fuese detectado el cáncer de pecho y estuvo con ella durante la época más complicada de los últimos tiempos. Tan bien acabaron que el piloto no se ha separado de su lado, por mucho que ella hubiese rehecho su vida. Ahora Terelu pide que no se especule acerca de una reconciliación con Pombo. Chica, ¡es que nos lo pones muy difícil! ¿De qué vamos a hablar si no?
Con B de boxeador: José Valenciano
Dos en uno. Novio y entrenador personal. Terelu quiso ponerse en forma y conoció a José Valenciano, exboxeador y entrenador y, entre pesa y pesa, surgió el amor. Parecía que lo suyo iba a durar, que ya se habían acostumbrado el uno al otro, que sus hijos ya se conocían y que ir cogida de un buen bíceps siempre está bien. Pero nada de eso. La convivencia no funcionó y la relación no pudo salvarse. Tampoco nos da mucha pena. Terelu, tú necesitas otro tipo de hombre a tu lado. Los músculos están muy bien, pero no son lo tuyo. Lo sabes. Lo sabemos. A ver con qué nos sorprendes ahora...