Isabel Sartorius: “Tengo pretendientes pero no me interesan”. La que fue novia del príncipe está gorda. Sí, ¿y qué? Ella ha decidido ponerle remedio y, además, ganarse unos dineritos con ello, así que se ha convertido en imagen de unas pastillas para adelgazar. Sartorius acudió esta semana a presentar la campaña y admitió que había perdido ya cuatro kilos. Aun así, se puso un vestidito suelto, que siempre es más agradecido. Los reporteros le preguntaron por la Familia Real y la chica se volvió loca. A ver, Isabel, exactamente, ¿por qué crees que te eligen como imagen? ¿Por tu dilatada trayectoria profesional? ¿Por tu condición de líder de masas? Pues no, amiga, no. Siempre llama la atención que alguien que conoció en la intimidad al futuro rey termine anunciando pastillas de adelgazar. En España somos así y ya deberías haberte dado cuenta. (Diez Minutos)
Nieves Álvarez: “Sé sacarle partido a la vida. Disfruto igual de un hotel de lujo que de un lugar humilde”. La top model es todo sensatez, responsabilidad y sencillez. No importa que gane cifras astronómicas, ella sabe capear la crisis como nadie. “No todo el mundo puede permitirse un Dior pero sí tiene derecho a ir bien vestida”, nos tranquiliza la modelo. Nieves, que está muy contenta con su trabajo en TVE porque le da mucha popularidad, dice que de momento no se ve en otro programa. Normal, chica, contando que la modelo es, posiblemente, una de las peores presentadoras de la televisión. ¿Cómo puede quedar uno tan poco natural si solo se dedica a leer lo que le escriben los demás? Nieves, te recomendamos una temporada en Sálvame para saber lo que es bueno. ¿Se imaginan la combinación Nieves Álvarez-Belén Estaban? Lloramos solo de pensarlo (Diez Minutos)
Carlos Moyá: “Carolina y yo vamos a repoblar el país”. El ex tenista se ha vuelto loco. Es triste, pero es así. “Vamos a repoblar el país, que se han ido 500.000 extranjeros en un año”, declara el deportista sin ningún tipo de pudor. ¿Se imaginan un país lleno de pequeños Carlos Moyá? ¡Qué miedo! Pero es que la vida de Carlos Moyá y Carolina Cerezuela es tan estupenda que el tenista solo quiere que todos disfrutemos de su felicidad. “En mi casa se duerme poco, pero estamos encantados con los niños”, declara el deportista. “La mayor prácticamente no da ningún problema. Con dos bebés es más complicado, pero también más divertido. Hay más ambiente en la casa, juguetes por todo el suelo y ruido”. Ahora resulta que el ruido es divertido. ¿Pensarán lo mismo los vecinos? ¿Y la niñera que tiene que hacerse cargo de todos los niños? ¿Y la señora de la limpieza que tiene que recoger todo del suelo? Ay, Carlos, ¡cómo se nota que tú no haces nada en casa! (Diez Minutos)
La infanta Elena, de compras con sus hijos. Tranquilos, lectores de Marabilias, nuestro dinero está bien invertido. La infanta Elena ha salido estos días de compras para renovar el vestuario de sus hijos y lejos de irse a las tiendas de la milla de oro, la infanta optó por cargar bien de complementos en M.E. de Mango. Que si ropa para los niños, que si unas gafas de sol de esas que valen 20 euros… no había bastantes manos para atender las cosas de la duquesa de Lugo. Y, ¿qué quieren que les diga? Que me parece bien. De acuerdo, luego viven literalmente como reyes, pero al menos que se les rompan las zapatillas y se les giren las costuras como a todo hijo de vecino. ¿Le sacarán a la infanta los avances de temporada o comprará de lo que hay en las perchas? ¿Se pondrá la ropa sin quitarle la etiqueta y la devolverá al día siguiente? ¡Seguro que hasta le dejan entrar más de cuatro prendas al probador! Qué injusticia... (Semana)
Rubén Cortada: “De niño jugaba a tenis descalzo”. Sí, estamos agotados de Rubén Cortada. ¿Tanto tiene que contar este chico por muy guapo que sea? Menos mal que El Príncipe llega a su fin y podremos descansar un poco de las bobadas que le preguntan en las entrevistas. Que si tiene éxito con las mujeres, que si tiene novia, que si jugaba al tenis, ¿qué nos importa? Rubén es un hombre como usted y como yo. Vale, sí, muchísimo más guapo, pero eso no implica que tenga una vida interesante. Ahora resulta que jugaba a tenis descalzo. ¡Pues muy mal por parte de su madre! Luego los niños se resfrían y no hay quien duerma. En fin, que, al menos, el actor confesó que utilizaba calzoncillos de Armani, “pero que depende del tiempo que haga”. Es decir, en verano no lleva nada debajo. ¿Quieren un consejo? Háganle caso a Rubén. Suelto se está mejor. (Lecturas)
Eugenia Martínez de Irujo: “Melani me parece estupendísima, una monada”. Es decir, no se la traga. A la duquesita no le hace ninguna gracia la nueva novia de su hermano y esta es su forma de demostrarlo. Eugenia viene de alta cuna y sabe que no puede acudir a una cita pública para poner verde a su nueva cuñada, así que dice que es estupenda y mona y se queda tan tranquila. Pero por dentro, está que trina. Que su hermano se ligue a una jovencita y, encima, nadadora, mientras ella tiene que conformarse con pasar las noches viendo la teletienda no es justo. Además, Eugenia se lo ve venir. Cayetano romperá con la nadadora, la nadadora se hará un Interviú y contará la verdadera historia de la familia de Alba. Y eso no se puede tolerar. Melani, haz el favor de buscar seguridad ya, que tu vida puede correr peligro. ¡Melani, por tu bien! (¡Hola!)
Eugenia Silva: “Os presento a mi hijo”. En Marabilias somos de saltarnos las normas y ahora vamos a hacerlo. En el repaso de las revistas solemos centrarnos en noticias que nadie comenta, en lo que de verdad interesa, pero tan impactante titular de la modelo Eugenia Silva merece un hueco en esta sección. Eugenia, encantados de conocer a tu hijo... ¿Algo más que decir? La modelo se marca una entrevista antológica donde comenta que ahora no tiene tiempo para nada, a lo que el periodista le replica: “Pero eso es normal, Eugenia”. Y es que Eugenia es un ejemplo de diversión constante. “Desde luego que la vida son dos días, pero me gusta vivirlos con responsabilidad. Esa frase se me hace un poco alocada y yo creo que soy bastante responsable”. Quién diría que esta mujer ha sido una de las modelos más famosas del país. ¡Si parece que nunca haya salido de casa! Eugenia, deja que tu niño se divierta, hija, que no hay que empezar a amargarle tan pronto. (¡Hola!)
Estoy preocupadísimo por Terelu. ¿Alguien sabe dónde está? Esta semana no hay ni rastro de la Campos en las revistas y eso solo puede evidenciar una cosa: Ha llegado el día del Jjuicio final. Dentro de pocas horas empezarán a caer meteoritos en llamas, los ríos se convertirán en sangre y Satán saldrá del infierno. ¿Qué ha podido pasar? ¿La habrán secuestrado? ¿Estará haciéndose unos arreglillos? Poca broma, que estoy preocupado. Por favor, si alguien sabe algo de Terelu, que se ponga en contacto conmigo a través de twitter. Gracias de antemano.
Esta semana, el Diario de Jorge Javier viene calentito. El presentador aprovecha su espacio para dejar constancia que le aburren soberanamente Cayetano Rivera y Eugenia Martínez de Irujo. Cosa que, realmente, nos tranquiliza, porque a nosotros nos provocan unos bostezos que no son normales. Pero Jorge Javier, en un ataque de sinceridad, nos cuenta su drama personal. “No sé caminar. Soy patoso, mal coordinado, quizás porque durante años luchaba por disimular la pluma. No sé vestir. Si voy a tiendas caras siento que las buenas prendas me quedan como un disfraz. De ahí que vaya a trabajar en chándal o siempre con los mismos vaqueros. Lucho contra la genética y aspiro a ser un tío bueno asistiendo regularmente a centros de estética”. A ver, Jorge, hay cosas que no pueden ser. Uno se puede arreglar -y si ves imágenes del Tomate, te darás cuenta del cambio-, pero los milagros no existen. Cuando uno es bajito, es bajito. Y cuando uno es tirando a feucho, es tirando a feucho. Pero, a cambio, la popularidad y la simpatía te han brindado la posibilidad de tener una larga lista de pretendientes con la que soñaría más de uno. Deja los centros de estética y dedícate al amor, que rejuvenece más y es más barato. (Lecturas)