Al final no ha sido coma pero sí ha sido un punto. No ha habido un sólo medio que no haya difundido la historia de Manel Monteagudo esta semana. El gallego, según la versión inicial, cayó en coma tras golpearse en la cabeza en 1979 en un barco en Irak, con 22 años, y despertó en 2014 sin saber que habían pasado 35 años ni reconocer al viejo que veía en el espejo. La cosa adquirió tintes almodovarianos cuando en Twitter se descubrió que Manel había tenido dos hijos en ese periodo con su esposa.
Sinopsis: la historia de una mujer (interpretada por Penélope Cruz) que permanece fiel a su marido en coma pero necesita satisfacer sus necesidades sexuales sin traicionar el sagrado matrimonio ni su fé católica, León de Oro en Venecia. Tras conocer su paternidad, supimos también que algunos vecinos de Manuel lo habían visto hacer vida normal todos estos años.
Se trataba de uno de esos comas que te permite salir el domingo a por churros, uno de los menos profundos. Esta mañana, Manel aparecía en TVE recogiendo cable, culpando a los medios de haber exagerado su relato. Lo de los 35 años en coma se lo tomaron al pie de la letra y lo de asustarse al ver un mando a distancia era una metáfora, al fin y al cabo Manel es poeta.
Manel Monteagudo, cuyo nombre real es José Manuel Blanco Castro, pasa a engrosar la lista de personajes Marca España, junto al pequeño Nicolás, Paco Sanz, el Rey del Cachopo o Anna Allen. Una denominación de origen que creó en 2012 el gobierno de Rajoy para proteger un producto humano que sólo de desarrolla bajo unas condiciones climáticas y culturales concretas. El gallego ha sido el rey de Twitter esta semana y los andaluces pueden estar tranquilos, no los han quitado el récord mundial de siesta.
El segundo trending topic de la semana ha sido el libro de recetas sanas y baratas que ha publicado el Ministerio de Consumo, que te enseña por ejemplo a preparar un salmón al microondas metiendo un lomo de salmón en el microondas. Hay veces en los que las campañas del Ministerio de Consumo parecen sacadas de un trabajo en grupo de 4ª de E.S.O. Alberto Garzón ya no puede cabrearse si le llaman ‘vende hummus’.