China superará a Estados Unidos como el mayor mercado del mundo de automóviles de alta gama a partir de 2016, gracias al creciente poder adquisitivo de cada vez más familias en el gigante asiático, según un estudio elaborado por la oficina de la consultora neoyorquina McKinsey & Co. en Shanghái.
El informe "Movilidad al alza: el futuro del mercado de automóviles de alta gama en China", que analiza la situación de este subsector del mercado, predice que las ventas de vehículos de esta categoría aumentarán un 12% anual desde este año hasta 2020.
Para entonces, según sus previsiones, el país oriental, que ya es el mayor mercado automovilístico mundial, tendrá el mismo número de ventas de coches de alta gama que los que registra ahora toda Europa occidental: unos tres millones de vehículos al año.
El estudio recoge que las cifras de ventas de automóviles de alta gama rondaron los 1,24 millones de unidades en China en 2012, sólo superados por los 1,7 millones de unidades en EEUU, al frente de una lista en la que, tras China, los mayores mercados fueron Alemania, Reino Unido, Italia, Francia, Japón, Rusia, Canadá y España. En España se vendieron cerca de 118.000 automóviles de este tipo durante el año pasado.
La previsión es que para 2020 China alcance esos tres millones de ventas anuales de este tipo de vehículos, seguida por EEUU, con unos 2,32 millones de unidades vendidas, y a continuación por Alemania, Reino Unido, Italia, Rusia, Francia, Japón, España (con 178.000 unidades) y Canadá.
El estudio basa parte de sus explicaciones para esta tendencia en la encuesta que hizo a finales del año pasado a 1.200 propietarios chinos de automóviles de alta gama, en 12 de las mayores ciudades del gigante asiático.
El 80% de los encuestados dijo contar con más de 200.000 yuanes de ingresos familiares anuales (24.663 millones de euros, 32.140 millones de dólares).
Según la consultora, el número de familias en China con este nivel de ingresos debería aumentar, al rito actual, desde los siete millones que hay aproximadamente ahora hasta unos 23 millones para 2020, lo que supondría para entonces el 7 por ciento de la población china.