Otra fábrica europea en el punto de mira, tras la caída brusca de las ventas en Europa por la crisis económica. La dirección de la marca automovilística alemana Opel se plantea poner fin a su producción en la planta de Bochum (oeste del país) en 2015, un año antes de lo anunciado, según informa este martes la edición digital del semanario Der Spiegel.
El jefe del consejo de vigilancia, Steve Girsky, ha dirigido una carta a la plantilla, en la que se advierte de la necesidad de llevar a cabo "notables medidas de ahorro" en todas las plantas del Alemania.
Opel se plantea cerrar la producción en planta alemana de Bochum en 2015. De no se conseguirse un acuerdo con los representantes sindicales, Girsky amenaza con poner fin a la producción del modelo Zafira el 1 de enero de 2015 en Bochum, lo que implicará la supresión de 3.000 puestos de trabajo.
A principios de año, la dirección de Opel anunció el fin de la producción en esa planta para 2016, después de un largo tira y afloja con los sindicatos. La filial de la estadounidense General Motors aseguró entonces, sin embargo, que en Bochum continuará funcionando el centro de logística, con una plantilla de 430 personas.
Opel mantiene desde junio conversaciones con la ciudad de Bochum y el estado de Renania del Norte-Westfalia para buscar alternativas de uso para la planta que dejará de producir automóviles.
Sobre el posible fin de la producción de automóviles Opel en Bochum se llevaba especulando desde hace meses y el cierre de la planta supone un nuevo revés para la ciudad, donde en 2008 la empresa Nokia ya cerró una fábrica y despidió a 2.800 trabajadores.
PLANTAS DE OPEL EN EUROPA
