La filial de vehículos eléctricos del endeudado gigante inmobiliario chino Evergrande alertó de pérdidas de unos 20.254 millones de yuanes (2.841 millones de dólares o 2.545 millones de euros) en el primer semestre, casi el triple que en el mismo período del año pasado.
En un comunicado remitido anoche a la Bolsa de Hong Kong -donde cotiza-, Evergrande NEV achaca la situación a un incremento de las provisiones por deterioro a raíz de las cuentas por cobrar de su matriz después de que la Justicia hongkonesa ordenara el pasado mes de enero su liquidación en favor de sus acreedores extranjeros.
Concretamente, la subsidiaria apunta a una provisión total de unos 16.737 millones de yuanes (2.348 millones de dólares o 2.103 millones de euros) durante el primer semestre.
Los resultados finales se conocerán previsiblemente este viernes, 30 de agosto, día en el que la junta directiva de Evergrande NEV se reunirá para aprobar las cuentas de la primera mitad del ejercicio.
Esta misma semana la compañía aseguró que sigue inmersa en las negociaciones con un posible comprador todavía anónimo, una operación avanzada a finales de mayo y que contemplaría la adquisición de hasta un 58,5% y la apertura de una línea de crédito para financiar las operaciones de Evergrande NEV.
Durante el pasado ejercicio la compañía registró una pérdida neta de 1.499 millones de euros, una abultada cifra que, sin embargo, fue un 57% inferior a la del año anterior.
La firma no se ha librado de los problemas de su matriz: este mismo mes, un tribunal chino ordenó que dos de sus subsidiarias entrasen en un proceso de bancarrota y liquidación reclamado por sus acreedores.
Evergrande, obligada a detener la producción en Tianjin
Y, tras haber fabricado unos 1.700 vehículos hasta finales de 2023, Evergrande NEV se vio obligada a detener la producción en su planta de Tianjin (norte) ante una "grave escasez de fondos".
Durante el pasado ejercicio la compañía registró una pérdida neta de 11.934 millones de yuanes (1.674 millones de dólares o 1.499 millones de euros), una abultada cifra que, sin embargo, fue un 57% inferior a la del año anterior.
Evergrande NEV, que en 2021 canceló sus planes para salir a bolsa también en Shanghái ante la falta de liquidez para mantener todas sus operaciones, fue señalada por el fundador del grupo, Xu Jiayin, como la gran esperanza para salvar al conglomerado, ya que el directivo aseguró que lo reorientaría para centrarse en el sector de los eléctricos en la siguiente década.
El grupo, convertido en la principal cara visible de la crisis inmobiliaria en China, se vio sumido el año pasado en una nueva crisis después de que Xu fuese puesto bajo una especie de arresto domiciliario por "sospechas de actividades ilegales".