Motor

Ford Edge, la alternativa de la marca americana a los grandes SUV europeos

Los buenos resultados del Kuga han llevado a Ford a dar el salto al segmento de los todo terreno de gama alta. Y lo hace con un Edge de robusta presencia y cuidada estética, que destaca por el elevadísimo confort de marcha y sus buenas aptitudes dentro y fuera del asfalto.

  • El Edge destaca por su cuidada estética y sus buenas apitudes off-road.

Por sus dimensiones y formas, el Edge juega en la misma liga que modelos como el Volkswagen Touareg, el Hyundai Santa Fe e incluso otros como el BMW X5 o el Mercedes GLE. Y lo hace en base a una calidad de acabados y de equipamiento que le permite ser una alternativa real a ellos, quizás sólo limitado por una gama de motores cuyo máximo exponente es este diésel de cuatro cilindros que, gracias a un doble turbocompresor, alcanza los 210 CV de potencia.

Un nivel que le permite ofrecer unas prestaciones más que suficientes para moverse a pesar de sus más de 1.900 kilos de peso con un notable dinamismo, sólo a costa de unos consumos no especialmente moderados cuando nos movemos a ritmos algo elevados. Unido al cambio automático de seis velocidades, más que por sus prestaciones la conducción del Edge destaca por lo agradable que resulta. Empuja con decisión sobre todo por encima de las 2.000 vueltas y mantiene altos ritmos en carretera con mucha facilidad. Sus 210 CV dan mucho de sí, aunque por peso, dimensiones y la resistencia al avance propia de este tipo de carrocerías pudiera parecer que falta potencia, pero su dinamismo está a la altura de lo que cabe esperar. 

Interior Edge.

La suave respuesta del motor a bajo régimen -aunque se echa en falta una mayor intensidad en la misma por debajo de las 1.900 rpm- le hace desenvolverse en ciudad en el día a día con mucho confort.

La puesta a punto de la suspensión busca claramente favorecer el confort de marcha, pero aun así se ha logrado el suficiente equilibrio para que el Edge afronte los tramos virados con mucha eficacia. El buen tacto de la dirección y una elevada estabilidad en el paso por curva a pesar del balanceo hacen posible disfrutar entre curvas. No es su terreno preferido, pero lo aborda de forma más que solvente.

Mejor aún cuando nos movemos en carreteras más abiertas o autovías, en las que el Edge se siente como pez en el agua. No tiene la precisión o la agilidad de un X5, pero sí se muestra mejor en este sentido que un GLE. Viajar con el Edge supone hacerlo con el confort propio de un todoterreno Premium. Suave en su rodar, silencioso para lo que se estila en la categoría y con unas suspensiones que filtran con altísima eficacia permiten disfrutar de largos recorridos con el confort de un buen turismo, siempre además con un aislamiento acústico muy logrado.

A todo ello se suma que el Edge tiene un habitáculo verdaderamente amplio, en el que cinco adultos pueden viajar con mucho desahogo, y que le sitúan entre los mejores modelos en este aspecto. El maletero también es grande en términos absolutos, y llega a ofrecer 602 litros con unas formas muy fácilmente aprovechables.

¿Y en campo? Pues aquí el Edge sorprende por la facilidad con que se desenvuelve. Y no sólo por pistas y caminos, sino también en tramos complicados, donde cuenta con suficientes ángulos de ataque y salida y algo más de 20 centímetros de altura al suelo que, junto a la eficaz tracción total, le hacen superar pasos más complicados de lo esperado. 

Y a todo ello hay que sumar un nivel de equipamiento de primer nivel. De serie tiene asistente de colisión frontal con frenado automático de emergencia, cambio automático de luces cortas y largas y reconocimiento de las señales de tráfico. Opcionalmente también puede tener detector de vehículos en el ángulo muerto, programador de velocidad activo, un sistema de aparcamiento semi-automático y uno de alerta por cambio involuntario de carril. También puede tener un limitador de velocidad inteligente, que utiliza la información de sistema de navegación y el sistema de reconocimiento de las señales de tráfico para adaptar el límite de velocidad fijado por el conductor al máximo de la vía por donde se circula.

DATOS TÉCNICOS

Ford Edge 2.0 TDCI Bi-Turbo 4x4 PowerShift

Motor: 2.0 litros / Diésel Nº de cilindros: 4 en línea Cilindrada: 1.997 cc. Potencia máx.: 210 CV a 3.750 rpm Par máx.: 450 Nm a 2.000 rpm Tracción: Total permanente Caja de cambios: Automática de 6 vel. Dimensiones: 4.808 x 1.928 x 1.692 mm Vel. máxima: 211 km/h Acel. 0 a 100 km/h.: 9,4 seg. Depósito de combustible: 69 litros Consumo medio en recorrido pruebas: 8,2 litros Capacidad de maletero: 602 litros Precio: 46.200 €

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