Y si en algo coincide el actual Defender de su predecesor de hace más de 60 años es precisamente por haber mantenido a lo largo de estas seis décadas su principal rasgo de identidad, convertirse en el modelo más eficiente en las más duras condiciones. También el diseño se ha sabido mantener, al menos en sus rasgos más básicos, y tanto el modelo original como el actual ofrecen un claro aire de parentesco.

Pero todo, o casi todo, llega a su fin, y la firma británica del grupo Tata Motors dejará de producir el próximo mes de enero tan emblemático modelo, símbolo de la conducción ‘off-road’ más extrema durante más de 60 años. Eso sí, para despedirlo decidió rendir un merecido homenaje en forma de tres ediciones especiales marcadas por sus estilos bien diferenciados: el Defender Heritage Edition, el Defender Adventure Edition y el Defender Autobiography Edition.

El Defender Heritage Edition se inspira en las primeras versiones de este modelo que aparecieron en la década de los 80, pues aunque el primer Defender apareció en el mercado en 1983 lo hizo como heredero directo de los legendarios Land Rover Series I, II y III nacidos casi 40 años antes. Su carrocería luce un color verde específico denominado Grasmere Green en contraste con el techo en color blanco, mientras que la parrilla delantera presenta el gráfico 'HUE 166', en clara referencia a las versiones pre-serie del Defender. Del Defender Heritage Edition se habrán fabricado un total de 400 unidades, en versiones de carrocería 90 Hard Top, 90 Station Wagon y 110 Station Wagon.

La versión Defender Adventure Edition tiene como detalles destacados la específica protección de la carrocería y de los bajos, además de incorporar unos neumáticos exclusivos R Goodyear MT. La producción será en el cese de producción de sólo 600 unidades, con un interior vestido con una exclusiva tapicería de cuero y en versiones 110 Station Wagon y 90 Station Wagon. Por último, el Defender Autobiography Edition apuesta más por el lujo y la exclusividad, con una carrocería bitono y un interior marcado por la tapicería de cuero denominada Windsor y apenas 80 unidades fabricadas.

Pero para exclusividad, la de la unidad 2 millones fabricada en la planta británica de Land Rover en Solihull, un modelo que incluye numerosos detalles especiales y acabados personalizados como un guardabarros de aluminio que tiene grabado el mapa de la Bahía de Red Wharf, donde se dibujó por primera vez en la arena el diseño del Land Rover original, así como la insignia exclusiva "2,000,000". En el interior, los asientos de cuero también llevan el mapa de la Bahía de Red Wharf y en los reposacabezas se ha bordado el logo " 2,000,000". En el asiento del conductor, se incluye una placa de aluminio hecha a medida que incluye la firma de todos aquellos que han contribuido en el montaje del vehículo. La matrícula especial S90 HUE rinde tributo a la matrícula de la primera preproducción de Land Rover, el HUE 166. Vendido en una subasta benéfica en Londres, alcanzó un precio de 400.000 euros en una oferta llegada desde Qatar.