La marca española asentada en Martorell ha vendido más de 5,4 millones de unidades del Ibiza desde que se iniciara su producción allá por 1.984. Un modelo que se exporta a mercados de todo el mundo, más de 75 países donde van a parar el 80% de la producción. Y tras el éxito del modelo anterior, el nuevo se presenta como un importante salto generacional, y que supone además el estreno de la nueva plataforma modular MQB A0 del Grupo VW. Y entre sus novedades, se prescinde de la carrocería de tres puertas y de la variante familiar, lo que podría entenderse como un paso para ofrecer en el futuro nuevos modelos que encajen en este perfil más deportivo y más práctico respectivamente.
Pero de momento, el nuevo Ibiza estará disponible únicamente con carrocería de 5 puertas, de la que ya se pueden efectuar pedidos con un precio de salida que, sin descuentos, arranca justo en los 14.000 euros. Un precio algo más elevado que algunos de sus rivales más directos, aunque en ellos sí llevan por lo general un descuento del que seguramente también disfrute el utilitario español.
Sus dimensiones son de 4,06 metros de longitud, 1,78 de anchura y 1,44 de altura, lo que supone 2 milímetros más corto, 87 más ancho y 1 más bajo que el modelo anterior y, sobre todo, unas proporciones muy diferentes que, junto a un diseño evolucionado, imprimen una estética muy diferente a simple vista. También crece la distancia entre ejes, 95 milímetros, para dotar no sólo de un chasis más dinámico, sino de un espacio para las piernas en las plazas traseras, uno de los puntos más flojos del anterior Ibiza. Gana de paso algo más de 60 litros en el maletero, llevando el volumen hasta los 355 litros, una de las mejores cifras en el segmento.
Entre los elementos de equipamiento que puede tener el nuevo Ibiza están el programador de velocidad activo, servofreno de emergencia con detección de obstáculos, apertura de puertas y encendido del motor manos libres, cámara de visión trasera o sistema multimedia con compatibilidad con Android Auto y Apple CarPlay. El acabado Reference incluirá, de serie, los airbags frontales y el de cortina, control de estabilidad, limitador de velocidad, asistente automático de frenada, ordenador de viaje, sensor de encendido de luces, elevalunas eléctricos delanteros y asiento del conductor regulable en altura entre lo más relevante.
En el acabado Style, el precio crecerá 1.340 euros respecto al Reference, e incluye control de velocidad de crucero y detector de fatiga. El equipo de sonido contará con la pantalla a color de 5 pulgadas, conectores USB, Bluetooth y la función Audiostreaming, que permite escuchar a través de los altavoces la música almacenada en el móvil, la PDA o cualquier lector MP3 asociado a través de esa conexión. Además, monta aire acondicionado, volante multifunción y asiento trasero abatible por partes.
En los Xcellence, sobre los Style, se incorporaría el climatizador bi-zona, sensor de aparcamiento trasero, acceso y arranque sin necesidad de llave y elevalunas eléctricos traseros.
Las versiones más deportivas, FR, incluyen frenos de disco en todos los motores, suspensión deportiva y llantas de 17 pulgadas. La oferta inicial de motores está formada por tres motores de gasolina —1.0 de 75 CV y 1.0 TSI de 95 ó 115 CV— y tres diésel —1.6 TDI de 80, 95 ó 115 CV—. A finales de año llegará otro motor de gasolina, de cuatro cilindros, un novedoso 1.5 TSI con 150 CV. La caja de cambios puede ser manual de cinco o seis velocidades según el motor y, para algunos de ellos, se puede pedir una caja de cambios automática de doble embrague y siete relaciones.