Los grandes SUV encuentran en los sistemas híbridos enchufables la mejor combinación de eficiencia y prestaciones. Así lo demuestran RX y F-Pace con estas dos versiones que ofrecen suficientes autonomías eléctricas en el día a día urbano, pero también en carretera, donde a pesar de sus elevadas potencias y grandes dimensiones se permiten largas cabalgadas entre repostajes.
Jaguar F-Pace 2.0 PHEV
Una de las últimas motorizaciones que ha incorporado la gama F-Pace es este híbrido enchufable de 404 CV, una opción sin duda muy recomendable por rendimiento y, sobre todo, por lo agradable de su funcionamiento tanto en el día a día en ciudad como en carretera.
Una versión que se ha actualizado además en la parte eléctrica con una nueva batería de mayor capacidad que le permite aumentar la autonomía eléctrica homologando 65 kilómetros en lugar de 53. Una batería que llega a una capacidad de 19,2 kWh frente a los 17,1 kWh de la anterior y que admite cargas de hasta 32 kW con corriente continua.
Al ponernos a sus mandos, el F-Pace sigue cautivando por su diseño interior, muy bien resuelto y que transmite una gran sensación de calidad, además de ofrecer mucho espacio, no tanto como el RX, para acomodar a cuatro adultos con todo el confort propio de un SUV de este segmento de lujo. Eso sí, el maletero pierde frente a las versiones de combustión y se queda en unos escasos 354 litros, casi 120 menos que aquellos.
En marcha destaca ahora la amplia autonomía que permite la nueva batería, con la que es fácil realizar cerca de 60 kilómetros en ciudad y alrededores con una conducción más o menos eficiente. Se mueve, por tanto, en este entorno con mucho agrado y con reacciones muy ágiles, no en vano el motor eléctrico desarrolla 143 CV que le aseguran moverse con mucha fluidez entre el tráfico urbano, pero también en recorridos interurbanos.
De cara a viajar, el sistema híbrido destaca por el elevado rendimiento que proporciona, 404 CV de respuesta muy rápida, gracias entre otras cosas al buen hacer de la caja de cambios, más rápida y eficiente que la del RX, pero también a que el motor de gasolina lleva sistema de sobrealimentación, una combinación que le confiere una conducción muy dinámica, con ciertos tintes incluso deportivos.
Acompaña un chasis de respuesta ágil por parte de la dirección y que a pesar de una suspensión que busca primar sobre todo el confort de marcha, logra que el F-Pace se sienta muy cómodo en trazados virados. Reacciona con precisión ante rápidos movimientos de volante y mantiene la trazada de igual forma y con unos movimientos de carrocería controlados, con reacciones previsibles en todo momento que contribuyen a disfrutar con mucha confianza de sus altas prestaciones.
Pero como ya hemos dicho, es a la hora de viajar y cubrir largas distancias donde más se disfruta de este F-Pace, y no solo por el trabajo de la suspensión, sino también por el aislamiento acústico que hace los viajes muy confortables. Todo ello con una enorme facilidad para ganar velocidad en cualquier situación y manteniendo consumos moderados si viajamos tratando de mantener un ritmo estable aunque no necesariamente bajo.
Moverte en autovía a ritmos de marcador de 140 km/h –con la batería ya descargada– supone un consumo de algo más de 9 l/100 km, quizás mucho en términos absolutos, pero no tanto si tenemos en cuenta que estamos ante un SUV de grandes dimensiones, más de 400 CV de potencia y por encima de las 2,2 toneladas de peso. Afortunadamente, con un depósito de combustible de más que razonable capacidad –69 litros–, podemos garantizarnos autonomías en carretera incluso por encima de los 700 kilómetros.
FICHA TÉCNICA:
VERSIÓN 2.0 PHEV AWD R-Dynamic S; MOTOR Gasolina, 4 cilindros, turbo + eléctrico de 143 CV; CILINDRADA 1.997 cm3; BATERÍA 19,2 kWh; POTENCIA CONJUNTA 404 CV; PAR MÁXIMO 640 Nm; CAMBIO Automático de 8 vel.; VELOCIDAD MÁXIMA 240 km/h; ACELERACIÓN 0-100 KM/H 5,3 s; CONSUMO EN RECORRIDO PRUEBA 9,6 l/100 km; AUTONOMÍA 700 km; AUTONOMÍA ELÉCTRICA 55 km; DIMENSIONES 4.747 / 1.664 / 1.874 mm; NEUMÁTICOS 255/55 R 19; PESO EN VACÍO 2.230 kg; MALETERO 354 l; PRECIO 85.700 €
Lexus RX 450h
El RX de quinta generación llega al mercado como un modelo muy cambiado respecto al anterior, aunque mantiene casi sus mismas proporciones marcadas por sus casi 4,9 metros de longitud, y tanto el diseño como la puesta a punto de chasis y suspensiones evolucionan hacia un SUV tan confortable como antes, pero más deportivo en su aspecto y más dinámico en la conducción.
Por dentro, el habitáculo sigue destacando por lo cuidado que está realizado y por la calidad de ajustes y materiales utilizados que reflejan un trabajo concienzudo para que el cliente disfrute nada más ponerse a sus mandos. Destaca también por la amplitud disponible para los pasajeros de las plazas traseras, especialmente en el espacio para las piernas que hace que viajar resulte una experiencia como si de primera clase se tratase.
El maletero está también muy cuidado en los materiales para forrarlo, pero su volumen no es especialmente amplio para un SUV de casi cinco metros de largo. Sus 461 litros pueden considerarse correctos, aunque se echa en falta algo más de altura.
Nos ponemos en marcha, y los primeros pasos en ciudad transmiten una sensación de suavidad y agrado fruto del funcionamiento del motor eléctrico, que nos permite cubrir con cierta facilidad unos 70 kilómetros, sin duda más que suficiente para un uso urbano y sin necesidad incluso de tener que recargarlo todas las noches. A pesar de sus casi 4,9 metros de longitud, se mueve entre el tráfico con agilidad.
Pero es en carretera donde se siente una puesta a punto del chasis diferente, que permite no sólo disfrutar de mejores sensaciones, sino también circular en recorridos virados a un ritmo más elevado, con más confianza en sus reacciones y una mayor eficacia. No tiene las reacciones deportivas de modelos como el BMW X5, pero es claramente más ágil que antes y pisa con más aplomo el asfalto a ritmo rápido.
Todo ello manteniendo un confort muy elevado y una notable calidad de rodadura, incluso con la suspensión de serie de muelles helicoidales y amortiguadores sin posibilidad de ajuste. El resultado es muy bueno, pues la suspensión absorbe muy bien las imperfecciones del asfalto y aísla a los ocupantes transmitiendo un rodar muy agradable en el paso de los kilómetros.
Un RX 450h+ que es además más agradable de conducir que el 350h de hibridación convencional, pues responde con más contundencia al acelerador sin necesidad de revolucionar tanto el motor de gasolina gracias al mayor protagonismo de los motores eléctricos. También de ello se benefician los consumos, muy bajos para el peso, dimensiones y prestaciones que proporciona los 309 CV.
Se mueve con mucha viveza en trazados abiertos y mantiene ritmos elevados con gran suficiencia, y con unos consumos que a ritmos sostenidos de 130-140 km/h de marcador se mueven en el entorno de los 8 l/100 km para una autonomía a la hora de viajar que se acerca, aunque le cuesta llegar, a los 700 kilómetros.
FICHA TÉCNICA:
VERSIÓN RX 450h Business; MOTOR Gasolina, 4 cilindros + 2 eléctricos de 182 y 54 CV; CILINDRADA 2.487 cm3; BATERÍA 18,1 kWh; POTENCIA CONJUNTA 309 CV; PAR MÁXIMO - Nm; CAMBIO Automático; VELOCIDAD MÁXIMA 200 km/h; ACELERACIÓN 0-100 KM/H 6,5 s; CONSUMO EN RECORRIDO PRUEBA 8,1 l/100 km; AUTONOMÍA 680 km; AUTONOMÍA ELÉCTRICA 70 km; DIMENSIONES 4.890 / 1.920 / 1.695 mm; NEUMÁTICOS 235/60 R 19; PESO EN VACÍO 2.240 kg; MALETERO 461 l; PRECIO 88.500 €