Llegó al mercado en 2006 y en poco tiempo se convirtió en uno de los SUV de lujo más demandados, un éxito de ventas que le ha valido para mantenerse en el mercado con mínimos cambios a lo largo de estos ocho años. Ahora, Audi se ha decidido a renovar por completo el Q7 en forma de una segunda generación que nada mantiene, excepto el propio concepto, respecto al modelo original.
Y aunque sus formas y su diseño recuerdan inequívocamente al Q7 de 2006, el nuevo modelo que saldrá a la venta en marzo de 2015 es un modelo cien por cien nuevo en todos los sentidos, en el que se ha buscado de entrada conseguir una imagen más moderna y, por encima de todo, mejorar la eficiencia con una drástica reducción de peso… y una gama de motores de última generación que incluirá una variante híbrida e-Tron.
Así, tomando como referencia una de las versiones con más tirón en la gama, el 3.0 TDI, la bajada de peso ha sido superior a los 300 kilos, un ahorro que le lleva a situarse por debajo de modelos tan rivales como el Mercedes GL 350 BlueTEC, la versión diésel más parecida por rendimiento. Para llegar a esa reducción, se ha trabajado en aligerar tanto el chasis como la carrocería, en la que se emplea acero de alta resistencia y aluminio, material este último que se emplea en la suspensión y los bujes.
Un aligeramiento que conlleva uno de los aspectos que más se ha querido mejorar a los mandos del Q7, el de hacer de este SUV un modelo más eficaz en asfalto, con una sensación de mayor control y sencillez de conducción. Para ello, se ha bajado también el centro de gravedad situando los motores más bajos y modificando el diseño de la propia suspensión, a la vez que introduce una dirección de asistencia eléctrica. Mayor novedad supone aun en la adopción de un sistema de dirección a las cuatro ruedas, haciendo que las traseras giren un máximo de cinco grados, a baja velocidad hacia la parte exterior del viraje aumentando radio de giro y a velocidad elevada acompañando a la delanteras en su mismo sentido para lograr una mayor agilidad y eficacia en trazados virados.
Cuando se inicie la comercialización estarán disponibles una versión diesel 3.0 TDI de 272 CV y una de gasolina 3.0 TFSI de 333 CV, aunque la variante de acceso será un diésel V6 TDI de 218 CV que llegará algo más tarde, siempre asociados a una nueva caja de cambios automática de 8 velocidades. También lo hará una versión híbrido enchufable de 373 CV con motor Diesel y eléctrico, el Q7 e-Tron, con un consumo homologado de 1,7 l/100 km gracias a una autonomía en modo puramente eléctrico de 56 kilómetros.
Aunque esta segunda generación del Q7 es ligeramente más pequeña, 4 centímetros menos de longitud y 1 centímetros menos de anchura, en el interior hay más espacio disponible, 21 milímetros más de espacio para las piernas en las plazas traseras y 41 milímetros extras de altura al techo. El portón trasero —con apertura y cierre eléctrico de serie— da acceso a un maletero de 295 litros de capacidad en configuración de siete plazas o de 890 litros en la versión de cinco plazas.
Incorpora nuevos sistemas de asistencia a la conducción, entre ellos el «cross-traffic assist», «exit warning sistem» y «trailer asistant». El primero alerta al conductor del tráfico que se aproxima por la vía al salir a ella marcha atrás, por ejemplo de un aparcamiento en batería. El segundo avisa antes de abrir las puertas de si hay peligro en forma de ciclistas o peatones aproximándose por detrás y por los laterales de la carrocería. El último sistema dirige el remolque marcha atrás en la dirección previamente fijada por el conductor y ayuda a conducir marcha atrás en línea recta.
Otra novedad en los sistemas de asistencia a la conducción es el programador de velocidad activo con función de atasco, que hasta 60 km/h puede mover el volante por sí solo para mantenerse entre las marcas que delimitan el carril. También hay un nuevo sistema de seguridad que recomienda reducir la velocidad en diversas situaciones, como al llegar a una curva o a una población.
Aunque no hay precio todavía en España, en Alemania el Q7 3.0 TDI de 272 CV es de 61.000 euros, lo que supondría unos 66.000 euros en España, una subida en torno a 3.000 euros, aunque ahora con más equipamiento y una superior eficiencia de los motores.