Opinión

El bueno, el feo y el malo en el autoconsumo

Lo importante de esta sentencia es que brinda posibilidades de participación de ciudadanos y ciudades en la socialización del autoconsumo

  • Paneles solares

El autoconsumo literalmente quiere decir comerse a uno mismo, es una expresión bastante fea. Hay quien prefiere la expresión prosumer, una contracción de las palabras productor y consumidor. Las dos se refieren a la generación de energía para consumo propio, actividad que desde siempre ha existido en España, y nunca ha sido ilegal. Es muy importante resaltar esto: No es ilegal, y nunca lo ha sido. Se ha regulado más o menos a lo largo de los tiempos, y con más o menos acierto. En tiempos lejanos se llamaba autogeneración, se ha cambiado desde entonces de nomenclatura, pero nunca se ha prohibido. Lo repito, para que quede bien claro como mantra: generar tu propia energía y consumirla es absolutamente legal. No hay nadie quién puede impedírtelo, y con el paso del tiempo será cada vez más normal, fácil y habitual.

Enrique de Azero, el representante de UNEF en Canarias hizo referencia a esta nomenclatura en su discurso inaugural de la Jornada de UNEF en Canarias: “Oportunidades de la fotovoltaica en el contexto insular y el papel de los municipios”, celebrada el viernes pasado. Según él, la expresión autoconsumo es la preferible, y prosumer implica una serie de obligaciones que no son propios del autoconsumidor, que resumiendo consisten en una serie de barreras administrativas más propias de un propietario de una central nuclear. No podría estar más de acuerdo con él, y con los demás agentes del sector que están criticando este aspecto.

He tenido el honor de defender una petición de un ciudadano ante el Parlamento Europeo, y de dirigir una denuncia ante la Comisión Europea contra la regulación española de autoconsumo. Uno de mis argumentos clave son las barreras administrativas, y justamente este aspecto ha prosperado, en el sentido que a raíz de ello la Comisión Europea le ha pedido a España aclaraciones sobre ello. Pero paradójicamente, aquí también percibo aversión por parte de los que quieren que les dejen hacer su trabajo en paz. Opinan que estas denuncias alimentan la errónea sensación del ciudadano que el autoconsumo no pueda hacerse.

Después de hacer una ponencia en un evento organizado por UNEF en la última edición de GENERA en Madrid, donde había argumentado que el término fijo demasiado alto en España realmente era más obstáculo al autoconsumo que el peaje de respaldo, que en Canarias no es aplicable, el famoso llamado impuesto al sol, se me acercó un amigo del sector que me echó en cara que siempre somos negativos sobre el autoconsumo en España, y que eso tenía que parar. Ya bastaba con tanto lamentarse, y el país necesita levantarse. También estoy de acuerdo con esta crítica. Yo también estoy harto de lamentarme, y prefiero levantar el país.  

El viernes pasado hablamos del porqué del desarrollo desigual del autoconsumo entre Canarias y Cataluña, como ejemplos. Decían que en Cataluña el autoconsumo se está propagando con una intensidad mucho más destacada que en cualquier otra comunidad. Puede ser que sea así, y es posible que sea porque para instalaciones de menos de 10kW este peaje no es de aplicación, como nunca deja de enfatizar Assumpta Farran, del ICAEN, cuando nos reunimos los integrantes de la Taula de Autoconsum. Puede ser también que a la gente en Cataluña ya no le importa dicho peaje, porque nunca se ha recaudado, o a lo mejor es por una cultura de autoconsumo que se ha fomentado más en un lugar que en otro.

Decían que en Cataluña el autoconsumo se está propagando con una intensidad mucho más destacada que en cualquier otra comunidad

Si el contexto de la jornada del viernes pasado era el insular y el papel de los municipios ya tenemos un punto de partida del cambio cultural. Tiene que ser desde abajo, desde las administraciones locales y desde los ciudadanos que los constituyen. Así lo destacó el representante de la Plataforma por un Nuevo Modelo Energético, como dijo, desde el diálogo y el respeto por los demás. Me llamó la atención que hasta la representante del partido más conservador de la mesa  felicitó a esta Plataforma por su trabajo de sensibilización de la ciudanía por las cuestiones energéticas que les conciernen. Enhorabuena, y por cierto, ha sido en representación de esta Plataforma que he podido defender el autoconsumo en Bruselas. Es un honor. Desde Bruselas también viene el borrador de la nueva directiva de energías renovables, que en mi opinión impediría el desproporcionado peaje de acceso Español a partir del 1 de enero 2020. Creo que nunca llegará a recaudarse en España.

Uno de los aspectos más importantes para defender posiciones a favor de una regulación española en regla con las Directivas Europeas, las buenas prácticas en otros países, o simplemente con el sentido común, es que los tienes que defender en público. Cambiar posturas políticas para mejorar la regulación es cuestión de presión mediática. Las opiniones ventiladas en petit comité tienen poca capacidad de promover cambios políticos o culturales. Intentaré esforzarme más para que los ciudadanos no me malinterpreten. Entiendo el cabreo del instalador; vaya rollo tener que explicarse una y otra vez, el autoconsumo es bueno, y sí que se puede, etc. Se siente el bueno de la película, y llama feo a quién ataca al malo.

La sentencia del TC posibilita la socialización del autoconsumo

Luego está el asunto de mezclar temas, algo que también a veces se me echa en cara en el contexto. Es inevitable que yo mezcle temas, porque desde mi perspectiva todos estos temas están interrelacionados, y desde el regulador a menudo están solapados de intenciones. Aparte de ello, a mí en cualquier ponencia me preguntan por life, the universe, and everything. Por mucho que intentas centrar un ponente o una mesa jurídica en un tema, si no son ya por las preguntas del público o del moderador, por su relación intrínseca, simple actualidad, los temas laterales saltan a la luz. Es propio de estar en un momento de transición, que todo esté cambiando a la vez. Un tema que me preguntaron fue el impuesto a la producción eléctrica del 7%, por unos desarrollos en los casos ante el Tribunal de Justicia de la Unión Europea. Justo ayer hubo otra novedad en este caso, que también puede tener efectos favorables para el autoconsumo de tipo II con vertido a red.

Otro de los temas estrella durante la jornada en Canarias era la sentencia del Tribunal Constitucional (TC), sobre el autoconsumo compartido, que ya no está prohibido. La última palabra de la anterior frase realmente ya no debería utilizar, lo comentamos con un compañero del sector cuando comimos juntos después de la Jornada de la UB y Torres, donde los dos habíamos coincidido como ponentes. Él hablando de autoconsumo, y yo de la ruina en la que han metido desde hace años a los productores de energías renovables de nuestro país desde hace años.

Era el día antes de que conoceríamos la sentencia favorable para el autoconsumo compartido. Ciertamente suena mejor decirlo así, a partir de aquí me concentraré en el lado bueno de las cosas y hablaré de progreso y sentencias favorables, en vez de decir que tal o tal aspecto del autoconsumo ya no esté prohibido.

Hay que separar los problemas de las oportunidades, y a veces una buena noticia puede ser ambas cosas a la vez. Pues entonces uno tiene que insistir en eliminar el problema, y aprovechar la oportunidad. Eso se llama pragmatismo. Lo importante de esta sentencia es que brinda posibilidades de participación de ciudadanos y ciudades en la socialización del autoconsumo, con la economía participativa, y mediante ello aportará a un cambio cultural que dará más impulso aún a la transición energética.

Piet Holtrop es abogado especializado en energía

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