Plataforma per la Llengua está preparando una campaña para promover en otoño el uso social del catalán en la comunidad educativa, tras detectar una situación "anómala" en un estudio que observa que el catalán se habla en el 24,3% de patios de escuelas e institutos, por debajo del 36% de la población general, y han visto un descenso del uso en alumnos y profesores al pasar de Primaria a Secundaria.
En rueda de prensa este jueves, el presidente de la entidad, Òscar Escuder, ha afirmado: "No solo nos jugamos la pervivencia de una lengua, con todo lo que comporta, sino que nos estamos jugando la cohesión social", la inclusión y la igualdad de oportunidades, por lo que con esta acción perseguirán concienciar también al entorno, como monitores y padres.
El estudio, publicado parcialmente hace unas semanas, detectó que el catalán estaba presente en el 24,3% de las conversaciones en los patios, y si bien eran el 35% de las conversaciones en Primaria, su presencia cae al 14,6% en Secundaria: "En la primaria -el uso del catalán- es bastante alto, pero en la secundaria podemos decir que más de uno de cada cuatro profesores no usa el catalán".
El técnico de Educación de la entidad Marc Guevara ha detallado que el 27,8% de los profesores de Secundaria se dirige a los alumnos en castellano cuando está en el patio, por lo que no se respeta la condición de lengua vehicular del catalán que marca la Ley de educación de Cataluña (LEC), mientras que en Primaria lo usan el 12,4%.
El trabajo se ha hecho "de incógnito" para no condicionar el comportamiento lingüístico
En el estudio han participado 750 alumnos y 50 profesores de 50 centros educativos -25 de Primaria y 25 de Secundaria-, entre los que hay 40 públicos y diez privados, y que están en los 35 municipios más poblados de Cataluña, llegando a una muestra de 4,6 millones de habitantes, el 61% de la población--, con representación de las cuatro provincias.
Estudio de incógnito
El trabajo se ha hecho "de incógnito" para no condicionar el comportamiento lingüístico: un observador de la entidad proponía un taller lúdico de sensibilización en el patio a la escuela, buscando la espontaneidad y que profesores y alumnos se comunicaran entre ellos para ver qué lengua usaban, y desconocían que se estaba observando la lengua que usaban.
Quien hacía el taller no usaba ni catalán ni castellano para no influir, sino que usaba el inglés: "Explicaba al profesor el taller, y se quedaba en un rincón observando", mientras el docente organizaba el grupo de alumnos y les explicaba lo que debían hacer, y aunque la escuela desconocía que se estudiaba la lengua, sí que avisaron a la Consejería de Educación de la Generalitat de este proyecto.
Más referentes en catalán
"Tenemos una mayoría de adolescentes que no ven el catalán como una lengua atractiva y útil, a pesar de que en los últimos 50 años no había habido tanta gente competente en la lengua, lo que demuestra que la competencia, a pesar de ser condición necesaria, no es suficiente para garantizar el uso", ha reflexionado Escuder.
Así, la campaña también tratará de favorecer que haya más referentes para los adolescentes en catalán, para lo que ven necesario implicar, además de la educación, el ámbito cultural y municipal: "Estamos en una situación de emergencia lingüística", sobre todo en la enseñanza.
Han observado que los datos demuestran que las personas que decían que el catalán se imponía en las escuelas "no tenían razón", y han añadido que en zonas que consideraban catalanoparlantes, hay ámbitos en los que prevalece el castellano.
Escuder ha explicado que hay estudiosos que dicen que el catalán está consolidado como lengua de grupo, pero no en conversaciones al margen, que son más en castellano, aunque en el estudio no se han fijado en esta distinción: "Si hubiéramos sido más concretos, seguramente habría más diferencia entre profesores hablando al grupo y profesores hablando a un alumno concreto".
Ha señalado que parte de la situación detectada puede deberse a la influencia de personas llegadas de otros países, pero ha responsabilizado a los catalanoparlantes de no hacerles sentir que el catalán es también su lengua.