La visita del presidente de la Generalitat de Cataluña, Quim Torra, a su antecesor, Carles Puigdemont, a finales de julio para celebrar el retorno de este a Waterloo tras la retirada de la euroorden del Tribunal Supremo, costó 13.800 euros a las arcas de la Generalitat, mientras que la segunda visita de Torra, en agosto, costó otros 7.872 euros.
Así lo ha admitido el ejecutivo catalán en su respuesta a sendas preguntas parlamentarias del PSC y el PP.
Los gastos incluyen los viajes y el alojamiento de Torra y de una comitiva de personas que incluye asesores, seguridad y comunicación, pero no los gastos de otros consejeros, como Elsa Artadi, según ha informado Economía Digital.