Elecciones generales 2023

Sánchez tendrá que atacar sin pasarse de frenada y Feijóo no cometer errores: los consejos para el cara a cara

Estos debates, según los expertos, son fáciles de perder y difíciles de ganar. Moncloa sabe que se juega su última bala y el PP, que puede rematar al presidente y enterrar el 'sanchismo'

  • Los presentadores Ana Pastor y Vicente Vallés durante en el plató del 'Cara a Cara. -

Solo hay un duelo retórico que despierte tanto interés en la televisión: el cara a cara entre un presidente del Gobierno y un líder de la oposición que aspira a sentarse en Moncloa. Y este lunes los españoles podrán ver en las cadenas y emisoras del grupo Atresmedia el séptimo combate de este tipo en 47 años de democracia, esta vez entre Pedro Sánchez Pérez-Castejón (PSOE) y Alberto Núñez Feijóo (PP). Estos debates, según los expertos, son fáciles de perder y difíciles de ganar. El equipo del presidente Sánchez sabe que se juega su última bala y el del líder del PP, que tiene en su mano rematar al presidente y enterrar el tan denostado 'sanchismo'.

El cara a cara, conducido y moderado por los periodistas Ana Pastor y Vicente Vallés, tendrá dos momentos álgidos en los que, como explica el experto en campañas electorales Jordi Rodríguez Virgili -doctor en Comunicación por la Universidad de Navarra-, Sánchez deberá atacar sin pasarse de frenada y Feijóo no cometer errores de calado que den al traste con su imagen de moderado y solvente. Ambos asumirán esos roles condicionados por las encuestas. No hay ni una que sitúe al PSOE con opciones de victoria. Y ese es el motivo por el que Sánchez enseñará el colmillo para desmontar al aspirante. Se verá, explican en su equipo, parte del estilo que el líder del PSOE ha paseado estas dos últimas semanas por los platós y estudios de los medios más críticos con su gestión.

No cabe duda de que ambos se comerán el uno al otro por los pactos. Y ahí aparecerá la retahíla de Vox y los más de 150 acuerdos municipales que el PP ha firmado con los de Santiago Abascal para gobernar. Sánchez volverá a atacar con las polémicas declaraciones de los cargos institucionales de Vox que el PP ha apoyado en los parlamentos de Baleares y de la Comunidad Valenciana.

De pactos y economía

Enfrente, el PP sacará la hoja de servicios prestados por Bildu al primer gobierno de coalición de izquierdas desde la Segunda República. Será una suerte de 'que te vote Txapote'; ese lema que tanto ha funcionado para movilizar al electorado de derechas y que contiene la rabia hacia un presidente que, como él mismo dice, busca acuerdos debajo de las piedras para aprobar avances como reforma laboral.

Los dos contendientes se blandirán incluso por la economía, que centrará la primera parte del duelo. Y es que pese a que el presidente cuenta con la baza de unos datos económicos aceptables en el contexto de crisis inflacionaria, el líder del PP cree que podrá morder al Gobierno agitando el avispero de una clase media que ha visto sus ahorros de la pandemia evaporarse.

Esta noche, Sánchez y Feijóo estarán acompañados de sus fieles escuderos: Óscar López, jefe de gabinete de Presidencia- y Marta Varela -a las riendas del equipo más cercano del líder del PP-. Solo podrán hablar con ellos antes del duelo y durante la pausa de publicidad. El presidente lleva preparando el debate desde el jueves, cuando dio comienzo oficial la campaña. Mientras que el líder del PP se centrará en él este mismo lunes.

Ambos equipos tienen muy claros los objetivos. "Eso es fundamental", arguye Virgili. Pero no solo, también "qué imagen quieren proyectar" para ganar puntos en "la percepción de los electores que quieren".

Feijóo va por delante en las encuestas. Y, por eso, tiene más que perder que ganarJordi Rodríguez Virgili

"Feijóo va por delante en las encuestas. Y, por eso, tiene más que perder que ganar. Es clave que no cometa errores y proyecte una imagen presidencial. No puede caer en provocaciones. Debe pasarle al presión a Sánchez de retador para invertir los papeles y mostrarse como presidente in pectore del país", explica el experto en comunicación política.

El líder del PP, no obstante, no podrá quedarse quieto. Deberá tocar las teclas que activen de nuevo el trasvase de votos del PSOE al PP, frenado tras la campaña de agitación emprendida por la izquierda y capitaneada por el expresidente José Luis Rodríguez Zapatero, el único defensor de la coalición convencido de su rol. No por casualidad, parte de la campaña socialista está inspirada en la de 2008, cuando el PSOE y el PP hipermovilzaron a sus electorados. Feijóo también tendrá que a Sánchez frente al espejo de sus contradicciones. "El ataque de Feijóo es minar la credibilidad del presidente", zanja Virgili.

Mientras, el presidente, según explican fuentes socialistas de primer nivel, tendrá dos opciones. Y, presumiblemente, recurrirá a las dos en función del momento. Sánchez querrá mostrarse como el voto útil de la izquierda ante una coalición de 15 partidos -Sumar- que no termina de carburar. Aunque las encuestas internas del PSOE sitúan su suma con Yolanda Díaz por encima de los 150 escaños y la de PP y Vox por debajo de los 170.

Las fugas y la izquierda útil

El presidente también querrá retener a los votantes que se puedan ir al PP y recalcar no solo que su opción es de izquierdas, sino también de centro. Por eso, defenderá su legado e incidirá en sus políticas sociales durante las dos crisis consecutivas -pandemia y guerra en Ucrania- que han trastocado su mandato. "Debe gritar que la alternativa a él es peor, porque el PP no gobernará en solitario", explica el experto de la Universidad de Navarra.

Pero lo cierto es que la beligerancia del presidente tiene un riesgo: "La telelvisión es un medio duro. No gusta la gente agresiva. El presidente tiene que modular. Y mostrarse más en el estilo de Ana Rosa y de Évole. Y, aunque no es fácil, es disciplinado y podrá cambiar de registros. Además, parte con la ventaja de que domina los temas mejor, porque es el presidente y tendrá datos concretos que lanzar a su adversario", opina el consultor.

Más allá del choque entre los dos, los periodistas que conducirán el debate también jugarán un rol. Ambos son perfiles incisivos: "Esto a Feijóo le puede jugar en contra, porque no le van a dejar que se quede en lugares comunes; tendrá que ser claro con Vox. Y a Sánchez le puede jugar en contra también, pero por el dominio de los tiempos, ya que está acostumbrado a hablar sin límite y sin interrupciones", aventura Virgili. Los españoles saldrán de dudas cerca de la media noche. Con medio país de vacaciones, la competencia del duelo será el descanso de los ciudadanos. La suerte está echada.

Apoya TU periodismo independiente y crítico

Ayúdanos a contribuir a la Defensa del Estado de Derecho Haz tu aportación Vozpópuli