"¡We will come back! Los venezolanos en el exilio vamos a regresar a Venezuela para liberarla", ha anunciado Leopoldo López en sus primeras declaraciones en Madrid tras su salida de la Embajada española en Caracas y su huida del país.
El opositor se ha congratulado por "respirar libertad" después de siete años privado de ese derecho. Ha reconocido que le impresiona mucho ponerse una mascarilla contra el coronavirus, algo que no había hecho hasta ahora, y ha agradecido a España y al Gobierno de Pedro Sánchez por haber acogido a su familia en el exilio.
También ha querido dar las gracias al presidente "legítimo" de Venezuela, Juan Guaidó, y ha agradecido a la UE por el apoyo que le han dado a este último y a la causa de la democracia en Venezuela. En ese punto, ha subrayado el "desastre" del chavismo, un modelo "totalmente equivocado, corrupto, erróneo, represivo y que afecta a millones de venezolanos". Más de 5,5 millones de venezolanos han tenido que salir "obligados" del país.
"No quería salir de Venezuela, siempre lo dije públicamente. Lamentablemente, las circunstancias me obligaron a salir de Venezuela", ha advertido de inicio. Tras ello, ha recordado las palabras del expresidente Romualdo Betancourt en su partido al exilio. "We will come back. Los venezolanos en el exilio vamos a regresar a Venezuela para liberar a Venezuela y construir la mejor Venezuela. No ha sido fácil esta lucha larga".
Una dictadura "cruel, asesina e indolente"
López ha hecho hincapié en que la "dictadura" de Nicolás Maduro "cada vez más cruel, asesina e indolente", con un presidente "criminal y asesino" que lidera una estructura "que ha saqueado y sigue saqueando" el país sudamericano. "Venezuela va a ser libre por la fuerza interior de los venezolanos".
"Hoy Venezuela está destruida, en todos los pueblos hay colas para comprar gasolina. Hoy el rostro del pueblo venezolano es de tristeza", ha insistido López ante un sistema "corrupto, antidemocrático, represor y vinculado al narcotráfico".
Por si no había quedado claro, López ha repetido que Maduro es "un asesino sin exageraciones" porque ordena a sus fuerzas públicas y paramilitares "que salgan a matar gente". Tras ello, ha adelantado que se va a dedicar "a promover una elección presidencial libre, justa y verificable".
En segundo lugar, se ha comprometido a hacer "lo que corresponda a que los responsables de torturas y asesinatos sean sometidos a la Justicia internacional", en particular la Corte Penal Internacional. Y tercero, ha adelantado que buscarán todos los mecanismos "para poder aliviar el sufrimiento de nuestro pueblo" mediante la llegada de ayuda humanitaria.
Sobre su encuentro con el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en la sede del PSOE en Ferraz, ha indicado que el presidente español tiene "mucha empatía por la libertad y la celebración de elecciones libres" y que piensa que Maduro es un "dictador". "La causa venezolana tiene que ser abrazada por todos los partidos que crean en la democracia y libertad", ha reclamado.