El PP cree que existe un "pacto entre el PSOE y Vox" para que Pablo Casado "no siga creciendo” en los sondeos, aseguran fuentes de la dirección del PP. Sostienen los populares que ha habido "contactos" entre los equipos de Pedro Sánchez y Santiago Abascal. Una de las pruebas de ese supuesto pacto es que el PSOE se ha negado en redondo al cara a cara televisivo Sánchez/Casado.
Los asesores de Casado creen que el líder socialista está encantado de que el único debate televisado, el próximo lunes 4 de noviembre, vaya a ser a cinco: PSOE, PP, Unidas Podemos, Ciudadanos y Vox, y creen que eso le beneficia en términos de imagen porque diluye la alternativa a los socialistas.
A pesar de esta situación que denuncia, el líder del PP no va a cambiar su hoja de ruta. Va a centrar su campaña en "las cosas que importan a la gente", como ha hecho hoy, lunes, durante el discurso en San Bartolomé de Tirajana (Tenerife) hablando de las cifras del paro y del empeoramiento de las expectativas económicas en España.
Casado va a enviar una carta a los electores, específica para cada una de las 52 provincias, explicándoles cuántos votos de Vox fueron a la 'basura' el 28-A porque dieron un segundo o tercer escaño al PSOE
Porque el PP está convencido de que la económica es el debate que más le interesa para seguir subiendo en las encuestas, por más que el PSOE haya forzado la exhumación de los restos del dictador Francisco Franco en plena precampaña electoral para favorecer el enfrentamiento entre su votante tradicional, más receptivo a medidas de la Ley de Memoria Histórica, y Vox.
Tienen claro que "Sánchez necesita a Abascal y Abascal necesita a Sánchez" para no caer. Por eso, el presidente del PP va a redactar en cada una de las 52 provincias una carta a los electores en la que les detallará cuántos votos de Vox fueron a la 'basura' el 28 de abril porque no solo perjudicaron la elección de un parlamentario del PP sino favoreció el segundo o tercer escaño socialista.
Casado quiere resaltar mucho, y así lo hará en el debate, el "fracaso personal" de Sánchez al no haber sabido formar gobierno pese a los resultados del 28 de abril, que le dieron 123 diputados, y dos posibilidades de hacerlo: con Unidas Podemos y otras fuerzas, o con Ciudadanos. En este último caso, Sánchez y Albert Rivera hubieran podido sumar una mayoría absoluta imbatible de 180 escaños.