La contaminación acústica es un tema que siempre sale a la palestra. Es salir a la calle de las grandes ciudades y empezar a escuchar una cantidad exagerada de ruidos, desde la sirena de las ambulancias, hasta el jolgorio de los bares. Un problema que tiene poca solución, debido a la cantidad de estímulos y de personas que viven en urbes como Madrid o Barcelona. Recurrir a los tapones o cascos que te ayuden a lidiar con el ruido constante son algunas de las soluciones que sugieren los expertos, aunque no son del todo efectivas y muy poco prácticas.
La Organización Mundial de la Salud es la entidad abanderada contra la contaminación acústica. Año tras año trata de buscar una solución que termine con el exceso de ruido que, al no verlo, lo tomamos como un mal menor y con el que acabamos conviviendo sin que nos demos cuenta. Sin embargo, infinidad de estudios confirman que la contaminación acústica afecta gravemente a nuestra salud. Y es que lidiar con la bulla constante en nuestro entorno de trabajo, en nuestras moradas o en las calles cuando salimos a dar un paseo es un tema que se debe remediar lo antes posible.
¿Cuáles son las principales enfermedades por la contaminación acústica?
Hay que recalcar que no todas las personas sufren los síntomas que se van a exponer. De hecho, hay ciertos individuos que al nacer en grandes ciudades no son conscientes de la cantidad de ruidos y estímulos con los que conviven diariamente, hasta tal punto que no los oyen. En el caso de personas que vienen de zonas en donde el silencio prima, sí que se percatan de este tipo de contaminación y pasan unos meses hasta que son capaces de convivir y pasar por alto el exceso de decibelios.
Las dolencias más comunes por culpa de la contaminación acústica suelen estar relacionadas con el sueño y con problemas auditivos. En rasgos generales, los pacientes que presentan algún tipo de enfermedad de esta índole suelen ser originados por otros problemas, aunque sí que por culpa de la contaminación acústica los síntomas se agravan. Las principales enfermedades por la contaminación acústica son las siguientes:
- Trastornos del sueño: el descanso es primordial para tener un buen estado de salud y poder estar más activo a lo largo del día. Evidentemente, la necesidad de la ausencia de ruidos y un ambiente que transmita paz es fundamental para poder caer rendido en el colchón. La contaminación acústica no es precisamente el mejor ingrediente para lograr una ambiente idóneo para el sueño. La falta de descanso está relacionado con múltiples problemas de salud, desde dolencias en el corazón, hasta enfermedades mentales.
- Subida de tensión arterial y problemas cardíacos: cómo puede ser que la contaminación acústica esté relacionada con problemas de corazón. La razón es muy sencilla, el jolgorio constante de las calles de las ciudades o de zonas concurridas aumenta los niveles de estrés. Esto se traduce en un incremento de la tensión arterial que repercute en nuestro corazón.
- Sordera inducida por el ruido: la principal enfermedad que produce la contaminación acústica es la pérdida de la sensibilidad auditiva. Varios estudios realizados por expertos en la materia, concluyeron que aquellas personas que se exponen a la contaminación presentan un aumento considerable de sordera. El exceso de decibelios produce tinnitus, una enfermedad muy molesta en la que se escucha constantemente un ruido de fondo.