La convocatoria por parte de la Vicepresidencia de Servicios Sociales, que encabeza Pablo Iglesias, de una reunión con las comunidades autónomas para abordar los rebrotes de coronavirus en las residencias de ancianos ha caído como un jarro de agua fría entre las patronales por no ser invitados al encuentro. Se quejan de que tanto el Gobierno como las comunidades "han perdido la oportunidad de abordar desde un punto de vista profesional" el aumento de casos en los centros residenciales.
El departamento que dirige Iglesias ha explicado que en la reunión sobre residencias de mayores se tratarán también los mecanismos de coordinación establecidos con las autoridades sanitarias para atender la situación de los centros, así como la adaptación del Plan de Respuesta Temprana a otros servicios sociales distintos al de las residencias. Además, se actualizarán los documentos técnicos de recomendaciones elaborados los pasados meses de marzo y abril, en plena pandemia.
El grupo de trabajo para estudiar la situación de las residencias se constituyó el 25 de junio, cuando se produjo la primera reunión. El segundo encuentro se produjo, de forma telemática, el 4 de agosto y hoy sería la tercera convocatoria por parte de la Vicepresidencia de Asuntos Sociales.
Un encuentro incompleto
Una reunión a la que, según denuncian desde la patronal
AESTE a
Vozpópuli, no han sido convocados muy a su pesar. "Pensamos que el Gobierno y las comunidades autónomas
han perdido la oportunidad de abordar desde un punto de vista profesional los contagios en las residencias", señala
Jesús Cubero, secretario general de la entidad.
AESTE cuenta con 55.000 plazas residenciales en sus cerca de 400 centros de asociados y dispone de 12.000 plazas de Centro de Día en más de 230 centros. Además, presta servicio de Ayuda a Domicilio a 60.000 personas y ofrece el servicio de Teleasistencia Domiciliaria a 150.000 personas.
"El virus no está dentro de las residencias, si no que es un problema de salud pública. Queremos evitar que entre y para ello es necesario contar con la opinión y la experiencia de los profesionales, empresarios y trabajadores del sector", continúa Cubero.
Es ahí donde la patronal lanza su crítica por su no presencia en la reunión programada entre el Gobierno y las comunidades: "Estamos trabajando en esta línea con las comunidades autónomas y pensamos que sólo estando presentes en esas reuniones podemos afrontar la situación", añade el secretario general de AESTE.
En las últimas semanas, y pese a las medidas que ya han vuelto a implantarse en muchos centros, como
aislarse o prohibir nuevamente las visitas de familiares, se han sucedido los brotes de coronavirus en numeras residencias de toda España. Entre los últimos, uno con 16 personas
positivas en una residencia de Tudela (Navarra); otro con 52 casos en
Candeleda (Ávila) y uno en O Incio (Lugo) en una residencia que ya ha sido intervenida por la Xunta de Galicia, con 56 positivos entre los internos -tres fallecieron- y ocho entre los trabajadores.
El horror de la pandemia
La pasada semana, la organización Médicos sin Fronteras (MSF) publicaba un durísimo informe sobre los "graves problemas" en las residencias de mayores durante la pandemia. Bajo el título de "Poco, tarde y mal. El inaceptable desamparo de los mayores en las residencias durante la covid-19 en España", el documento denunciaba "el abandono de las personas más vulnerables y la desprotección del personal que las cuida".
Falta de recursos, de supervisión sanitaria,
ningún plan de contigencia, carencia de protocolos para
cuidados paliativos o no priorizar las derivaciones hospitalarias de los enfermos, eran algunas
de las denuncias recogidas por la organización humanitaria que recoge su experiencia en casi 500
centros sociosanitarios a los que dio apoyo durante las fases más agudas de la epidemia, en ámbitos como prevención y control de la infección, diseño de protocolos de sectorización o el uso de equipos de protección individual (EPI).
Las estimaciones de personas mayores fallecidas en estos centros durante la pandemia fue de 27.359 entre el 6 de abril y el 20 de junio, según datos del Ministerio de Sanidad. Es decir, el 69% de las personas fallecidas por la covid-19 en toda España.