La alcaldesa de Madrid, Ana Botella, ha comparecido este miércoles por la huelga de limpieza que hace más de una semana vive la capital.
En la convocatoria con los medios, la regidora ha amenazado a los trabajadores de las empresas concesionarias del servicio de limpieza en Madrid con denunciarles por incumplimiento de los servicios mínimos. Así, ha advertido de que llevará a la Fiscalía el conflicto si no hay arreglo en 48 horas, argumentando que ya ha formalizado el aviso a las empresas de que no se están cumpliendo los servicios mínimos.
Agotado el plazo, el Ayuntamiento asumirá directamente el servicio mientras dure el conflicto a través la empresa pública Tragsa. Tanto Botella como fuentes municipales citadas por Efe han precisado que Tragsa no puede asumir más que los servicios mínimos, ya que rebasarlos chocaría con el derecho de huelga de los trabajadores.
Asimismo, Botella ha advertido a las empresas concesionarias de la limpieza viaria de que deberán asumir los gastos del servicio prestado por Tragsa al ser, según la primera edil, las obligadas a cumplir los servicios mínimos durante la huelga convocada por los sindicatos en protesta por la presentación de un ERE para algo más de 1.100 de los 6.000 trabajadores del sector.
Ha recordado que el Ayuntamiento se dirigió este martes formalmente a las empresas concesionarias para exigirles de manera "efectiva" el cumplimiento de los servicios mínimos que se habían decretado ante la convocatoria de huelga. Pero a estas horas y "pese a las labores de escolta y protección", ha recalcado, los servicios mínimos "no se están cumpliendo", cuando estos son a juicio de Botella "un deber de las empresas".
La alcaldesa de Madrid ha reprobado una "huelga salvaje" en la que no se han respetado los "cauces legales" por los que debe discurrir el ejercicio de un derecho fundamental y ante acciones de los piquetes que han provocado una situación que, ha apostillado, no se puede "tolerar" por más tiempo. "Madrid no puede esperar más a que se pongan de acuerdo", ha recalcado.
Preguntada sobre la posibilidad de modificar las condiciones del contrato para marcar una plantilla mínima, ha indicado que no contempla esa opción y que la "relación laboral" existe entre las empresas y los trabajadores y ha sostenido que el Ayuntamiento no conocía "ningún plan" de "ninguna" de las empresas para acometer despidos.
Por otra parte, ha anunciado que "esta situación no supondrá ni un euro a los madrileños", a los que ha dado las gracias por "estar a la altura" en esta situación.