La huelga de limpieza en Málaga ha finalizado, pero su imagen navideña se ha visto empañada por más de 1.500 toneladas de basura en las calles de la ciudad, por lo que habrá que esperar unos días para que se recupere la normalidad y esté totalmente limpia.
Sin duda los más perjudicados han sido los comerciantes y los hosteleros, que ya al límite por la acumulación de residuos decidieron este lunes contratar un servicio de recogida por motivos de salubridad, higiene e imagen de la ciudad.
La suciedad de las calles y la tensión desde el primer día de huelga entre los trabajadores de la empresa de limpieza hacía prever que se desconvocaría pronto, pero se han necesitado cuatro días para que el comité de Limasa y el Ayuntamiento de Málaga alcanzaran un principio de acuerdo, ratificado este martes por la asamblea de trabajadores, por el que se retira de forma "inmediata" el Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE).
El alcalde, Francisco de la Torre (PP), así lo anunció en su cuenta de Twitter: "Principio de acuerdo en el conflicto de Limasa". Las partes han llegado a un acuerdo horas más tarde de que el regidor anunciara la contratación de empresas para retirar con urgencia los residuos acumulados en puntos críticos de la ciudad.
El alcalde malagueño ha reconocido "no estar insatisfecho" con la solución final y ha indicado que "los que ganan son los ciudadanos". "Es el mejor regalo para Navidad que podía recibir la ciudad", ha añadido. Los representantes de los trabajadores también se han mostrado "satisfechos", aunque sin olvidar "la situación en la que estábamos, con la empresa dando bocados a nuestro convenio colectivo". "Nunca nos ha ofertado nada, sino que ha recortado artículos del convenio", ha indicado el presidente del comité, Manuel Belmonte.
Condiciones del acuerdo
Pese a la pérdida de la paga de productividad, principal concesión de los trabajadores en esta negociación, Belmonte ha incidido en que este principio de acuerdo es un "logro". En este sentido, ha admitido que "ha conseguido más el que ha quitado al que lo tenía, que éramos los trabajadores". Según lo suscrito, se elimina la paga de productividad en 2014, que hubiera alcanzado los 1.119 euros, pero en 2015 hay un incremento de 277 euros en la de septiembre, superando los 1.200 euros.
En el resto de conceptos habrá congelación salarial, aunque la antigüedad se actualizará. Asimismo, desaparecen la ayuda de diciembre y la cesta de Navidad y se reduce el vestuario y el complemento en caso de baja por enfermedad durante los primeros 15 días a partir de la tercera en el año.
Las vacaciones se distribuirán en 15 días en el periodo considerado de verano (de mayo a octubre) y en 21 días en el de invierno (de noviembre a abril), y se mantiene la jornada semanal de 35 horas, trabajando de lunes a viernes, con un sábado cada cuatro. Una distribución que permitirá, a juicio de De la Torre, "dar un mejor servicio". De igual modo, se acuerda crear una comisión consultiva entre los trabajadores, el Ayuntamiento y la dirección para determinar los criterios de aplicación de la modificación del articulado del convenio colectivo.
