La pareja de holandeses desaparecidos en Murcia, Ingrid Visser y Lodewijk Severein, se dieron cita con sus tres presuntos asesinos materiales en una casa alquilada de Molina de Segura por motivos de "negocios", y una desavenencia en esa negociación llevó a un "desencuentro importante" que provocó el crimen, informa Europa Press.
Así lo han hecho saber en rueda de prensa el delegado del Gobierno en la Región de Murcia, Joaquín Bascuñana, acompañado por el jefe superior de Policía de Murcia, Cirilo Durán, quienes no han dado más detalles de la naturaleza de estos negocios, aunque no les "consta", de momento, que fuera por motivos de drogas.
Al parecer, los dos holandeses desaparecidos convivieron con sus presuntos asesinos, al menos el 13 y el 14 de mayo, y murieron por efecto de una violencia "importante", pero se desconoce todavía cómo fueron asesinados, a la espera de los informes forenses, que todavía no han confirmado la identidad de los restos mortales.
La rueda de prensa se ha producido hora después de conocerse la detención en Valencia de dos ciudadanos de nacionalidad rumana de 47 y 60 años como sospechosos del crimen. Estos dos arrestos se sumaban a la de otra de un ciudadano español de 36 años el pasado sábado también en Valencia.