Sociedad

El TS ratifica: la piscina de Pedro J. en Mallorca es de uso público pero no se abrirá

Esta instalación, en la vivienda que posee Pedro J. Ramírez en la Costa de los Pinos, ocupa terrenos de dominio público, por lo que el Supremo avala la decisión de la AN. El periodista se declara "razonablemente satisfecho" con el fallo. 

  • El diputado de ERC Joan Puig, carné de parlamentario en boca, entra en la piscina de Pedro J.

El Tribunal Supremo (TS) ha ratificado este jueves la sentencia de la Audiencia Nacional (AN) que ordenaba la apertura al público de la piscina de Pedro J. Ramírez en Mallorca. Según informa la Cadena Ser, la sala de lo contencioso-administrativo del TS confirma la anulación de la orden ministerial que le dio la razón al Lobby per la Independència. El fallo del Alto Tribunal rechaza sendos recursos del periodista y de la plataforma. Y es que ambos estaban en desacuerdo con lo decidido por la AN.  

La instalación de la polémica, en la vivienda que posee Pedro J. Ramírez en la Costa de los Pinos, ocupa terrenos de dominio público, por lo que el Supremo avala la decisión de la AN. Las dos sentencias anulan la orden ministerial que en 2005 concedía a Ramírez tres meses de plazo para presentar un proyecto de uso público de la piscina, quedándole reservado el uso privado durante los meses de verano. Sin embargo, fuentes jurídicas aseguran que la fundamentación jurídica de las sentencias permite que el director de El Mundo no tenga que abrir su piscina para el uso público. 

En twitter, el propio Ramírez ha colgado este mensaje tras conocer el fallo: "Acabo de declarar a Efe que estoy "razonablemente satisfecho" con la sentencia del TS sobre la bañera de nuestra casa de Mallorca".

Antecedentes

En el verano de 2005, el entonces diputado de ERC Joan Puig se adentró junto a un grupo de personas de la izquierda balear en la finca del director de El Mundo en el norte de Mallorca. Tras un enfrentamiento con los vigilantes de seguridad, que le impidieron el acceso, Puig aseguró que tres personas fueron golpeadas y resultaron heridas leves, por lo que interpuso una denuncia en el cuartel de la Guardia Civil de Artà.

El entonces director de El Mundo el Baleares, Eduardo Inda, inició entonces una campaña mediática para denunciar el supuesto allanamiento de morada, tesis que el Tribunal Supremo ha rechazado finalmente.

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