La FIA ha convocado una reunión en el circuito de Montmeló con los jefes de todas las escuderías de Fórmula 1 para estudiar la implantación de un nuevo modelo de sanción a los pilotos que cometan infracciones. La idea es poner en marcha una especie de carné por puntos que podría acarrear suspensiones. Los afectados prefieren esto a seguir pagando multas.