Según informan fuentes de la investigación, ese abono de 307 millones de pesetas se hizo en efectivo y nunca más se supo adónde fue a parar tan cuantiosa suma de dinero. Jordi Pujol fue presidente del Gobierno catalán hasta el año 2003, es decir, que cuando se produjo ese importante ingreso en la cuenta de Andorra -cuyos fondos eran de su propiedad- el exlíder de CIU seguía al frente de la Generalitat. La juez la califica como una "cuenta que era propiedad en la sombra de Pujol i Soley".