Es una apuesta del ganadero Antonio Pireiro por la pervivencia de una raza bovina en extinción quien después de su jubilación comenzó la aventura, y son sus hijos, Antonio y Miguel, quienes se dedican a su crianza y manutención junto con José Fernández del Asador Gonzaba, unido a esta iniciativa comercializando la carne.
El buey rubio gallego cuenta en España con unos 800 ejemplares y se estima que, aproximadamente, 300 pastan en Galicia siendo considerado ya un emblema regional.
La especie hace tiempo que dejó de ser animal de trabajo. Sus cualidades culinarias han hecho de estos ejemplares únicos, aunque costosos de mantener, un animal casi mítico de nuestra restauración cuya carne se valora como la mejor de España. Tal es así que su alta demanda ha supuesto el fraude en algunos casos, de ahí la consabida frase de “que no te den 'vaca por buey’". Se estima que 9 de cada 10 restaurantes sirven vaca por buey.
De la cabaña actual, Gonzaba sacrificará a los pocos días un ejemplar, su carne madurará dos meses para degustarse en las jornadas del buey gallego a finales de septiembre. Con más de 40 años de historia en Galicia, Gonzaba también cría, en la finca O Pireiro, unas 40 vacas rubias gallegas y cachenas, además de wagyus y otras razas.
M-V-P
Si no desaparece la raza "rubia gallega" no tienen porqué desaparecer sus bueyes ya que el buey es el macho castrado sin extirparle los testículos una vez alcanzada la mayoría de edad (cinco años en los toros) y cebado al menos otros cinco años. Antes, cuando los bueyes eran empleados como animales de trabajo tenía sentido su crianza. Hoy poco sentido tiene la misma ya que quitando el lomo y el solomillo poco uso culinario tiene el resto de su carne, sobre todo por lo carísima que sale la crianza.