La Audiencia Nacional se prepara para un "extraordinario incremento de carga de trabajo en la Sala de lo Penal". Según consta en el acuerdo de 08 de mayo de la Sala de Gobierno, se han convocado dos plazas de magistrados para reforzar los tribunales y paliar el parón de los macrojuicios de corrupción. La medida responde a la petición de la juez Concepción Espejel, quien asegura que la paralización actual "va a dificultar enormemente la recuperación de la actividad normal".
Tras la publicación del Real Decreto del 14 de marzo se suspendieron todas las actuaciones y plazos procesales, excepto aquellas causas con preso y la petición de medidas cautelares urgentes. 48 horas antes de que el Ejecutivo declarara el estado de alarma se celebraron en la Audiencia Nacional dos de los juicios masivos previstos en la agenda 2020: el de la visita del Papa a Valencia y el del caso Ausbanc. Ambos fueron suspendidos y quedaron pendientes de reanudación. A la lista se suman aquellos que ya tenían fecha y los que aún estaban a la espera de un calendario de vistas.
La Sala de Gobierno ha acordado la contratación de los dos magistrados por un plazo de seis meses, "prorrogable por plazos de igual duración de manera sucesiva, en su caso, y hasta completar el límite temporal de dos años", según consta en la documentación a la que ha tenido acceso Vozpópuli. Ambos pasarán a formar parte de la Sala de lo Penal, encargada de juzgar las macrocausas de corrupción investigadas en España.
De Caixanova a la Gürtel
En la agenda de pendientes figuran la causa por presunto blanqueo de capitales de la Caja de Ahorros del Mediterráneo (CAM), que aún no tiene fecha; la de Caixanova, cuyas sesiones estaban previstas para el pasado 18 de mayo; el caso de la SGAE, que tenía fecha de inicio el próximo 21 de septiembre; y hasta cuatro juicios de la Gürtel, dos de los cuales ya habían empezado. Se trata de procedimientos con casi un centenar de imputados, docenas de testigos, decenas de peritos y miles de folios de información.
Para hacer frente a la carga de trabajo, los jueces convocados serán adscritos a las Secciones Segunda, Tercera y Cuarta "con el fin de que asuman las ponencias que según las normas de reparto aprobadas les correspondan, sin perjuicio de que puedan ser llamados a formar Sala en otras Secciones por puntuales necesidades de servicio". El Consejo General del Poder Judicial deberá dar el visto bueno a la medida.
Riesgo de que se suspendan juicios
Según explica la magistrada jefe, la ausencia de estos nuevos refuerzos "provocaría la suspensión de algunos de los numerosos señalamientos que se encuentran pendientes". Hace especial hincapié en aquellas por su tipología (delitos económicos y estafa) y su volumen (elevado número de intervinientes y perjudicados) "requieren la constitución del tribunal en un amplísimo calendario de sesiones de juicio oral".
Espejel detalla la lista de necesidades de una Sala de lo Penal que se ha visto particularmente afectada por el parón en plena pandemia. Según apunta, en la Sección Segunda se considera necesario "agilizar los señalamientos relativos a la causa Gürtel y demás causas complejas que cuentan con mas antigüedad de entrada". En la Tercera se requieren magistrados de apoyo para la celebración de "numerosas vistas señaladas para el próximo semestre y la carga de trabajo existente, que ha sufrido un incremento progresivo y constante en los últimos años". Y en la Cuarta, se precisan manos para resolver los recursos de apelación "de cierta complejidad, que exigen un estudio exhaustivo ante la naturaleza de los delitos imputados", de causas como Púnica, Vitaldent, Acuamed, Lezo, Banco Popular y la Operación Pretoria. Se prevé que la convocatoria aprobada sirva para mitigar la carga.
Futuro 'post-covid'
Aún con la llegada de apoyos, se espera que el volumen de trabajo pendiente aumente. Solo entre el 15 de abril y el 6 de mayo se registraron 695 escritos en la Sala de lo Penal. Aunque la cifra "no alcanza ni la décima parte de los que entraron en el mismo periodo del año 2019", los funcionarios solo han podido dar trámite a algunas de las causas debido al estado de alarma.
Además, Espejel advierte de que "de la información aportada por los Juzgados Centrales de Instrucción, se concluye la pronta elevación de causas complejas y relevantes para su enjuiciamiento", lo que se traduce en mayor carga en la Sala de lo Penal.
