El exresponsable de los Mossos d’Esquadra juzgado por sedición en la Audiencia Nacional, José Luis Trapero, ha declarado este miércoles en la tercera sesión del juicio que se ofreció personalmente ante sus comisarios de confianza a detener al entonces presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont. Fue días antes de que se produjera la declaración unilateral de independencia el 27 de octubre de 2017 y en previsión de que las autoridades judiciales les ordenasen actuar.
"¿Creéis que lo debo detener yo?", les dijo aquel día a sus mandos de confianza entre los que estaban Ferrán López y Juan Carlos Molinero. "Ellos dos se ofrecieron a hacer esa detención y que yo me quedará en Egara (la sede central de los Mossos)", ha añadido. En cualquier caso, ordenó que los arrestos de Puigdemont y del resto del Govern corriesen a cargo de los máximos mandos de los Mossos.
En la previa, el fiscal Miguel Ángel Carballo cuestionó la existencia de ese plan para detener a Puigdemont que Trapero ya desveló el año pasado en su intención de marcar distancias con el plan rupturista por el que le piden 11 años de cárcel.
Miedo a las filtraciones
Un informe de los Mossos admite que esa iniciativa no se llegó a plasmar por escrito por miedo a filtraciones. "Sí que dí algunas instrucciones, como le queramos llamar. Hablábamos de todos los temas y no queda claro a veces qué es una instrucción. Pero sí que dí alguna instrucción", ha declarado.