Cada vez que usted hace una llamada de teléfono o se conecta a Internet desde su casa, sus palabras y correos electrónicos pasan por las redes del operador con el que tiene contratado el servicio para llegar a su destino. Pero esas redes no son gestionadas directamente por su operador.
Aunque Huawei es conocida principalmente como fabricante de telefonía móvil, el grueso de su facturación lo marca el desarrollo de redes de telecomunicaciones. De hecho, más de la mitad de sus ingresos mundiales vienen de ese concepto. De los 51.000 millones de dólares que consiguió embolsarse en 2015, 31.000 millones los consiguió su división de redes, que además creció un 20%.
Si nos vamos a nuestro país, su músculo es evidente. Los grandes operadores, Movistar, Vodafone y Orange, cuentan con Huawei como socio tecnológico para el desarrollo de sus infraestructuras de banda ancha tanto fija como móvil. Y desde hace no demasiado, también trabaja con MásMóvil, tras quitarle el contrato a otra compañía china, ZTE.
Vodafone ha depositado en Huawei la modernización y mantenimiento de toda la infraestructuras de red de ONO, compañía que adquirió hace unos meses
Aunque la competitividad entre ZTE y Huawei es muy grande, de puertas afuera reina la concordia. De hecho, los directivos de ambas empresas no esconden la forma en que llaman a sus respectivos rivales: "primos". Se dedican a lo mismo, son del mismo país y sus sedes en Shenzen (China) están separadas tan solo por unos metros de distancia. Podrían ser familia.
La mita de los 342 millones millones de euros que ZTE factura en nuestro país corresponden al área de prestación de servicios, en la que se enmarca el tendido de antenas y redes de telecomunicaciones. Un departamento que ZTE está volviendo a reestructurar tras la pérdida de su contrato con MásMóvil.
Con Telefónica y solo desde 2016 Huawei ha firmado casi una decena de acuerdos relacionados con nuevas redes de telecomunicaciones, sobre todo en el ámbito del 5G. También ha hecho varios anuncios con Vodafone y Orange, amén del que ya hemos comentado con MásMóvil. Y es que Huawei y ZTE son dos de los fabricantes más activos en I+D cuando hablamos de redes 5G, el futuro de la movilidad.
Ericsson, uno de los desarrolladores de red más potente hace unos años, ha anunciado el recorte de una quinta parte de su plantilla ante el empuje de las compañías chinas
Telefónica y Huawei también trabajan juntos en soluciones NB-IoT (Internet de las Cosas), que se lanzarán en Europa y América Latina a lo largo de este año. Una alianza que comprende el diseño conjunto de soluciones integrales de NB-IoT que persiguen desarrollar el futuro ecosistema de comercialización de Internet de las Cosas.
Por su parte, Vodafone, que en su día compró la red de ONO para ampliar su catálogo de productos, ha confiado la modernización y mantenimiento de infraestructuras a Huawei, tal y como publicó Expansión hace unas semanas.
La otra cara de la moneda, Ericsson
Ericsson y Nokia, que en su día fueron dos de los desarrolladores de red que copaban gran parte del mercado, han cedido protagonismo ante el empuje chino. De hecho, en el concurso en el que se puso sobre la mesa el mantenimiento y desarrollo de la red de ONO la empresa finalista fue la sueca Ericcson, pero perdió ante Huawei.
Mientras, Nokia anunció hace unos meses 1.200 millones de euros en recortes para evitar duplicidades tras adquirir Alcatel, una compra con la que reforzó su tecnología para desarrollar redes IP, ópticas y de banda ancha.
Ericsson ya lleva varios años metiendo tijera a la compañía. De hecho en sus planes está el recorte de una quinta parte de su fuerza laboral, debido al empuje de Huawei y a la nueva situación del mercado. Tras la compra de Alcatel por parte de Nokia ha nacido un gigante con el que es complicado competir.