Se llama Stephen Crowley y es de Dublín. Su hija Hannah, de 18 meses, padece de linfohistiocitosis hemofagocítica, una enfermedad rara de pronóstico grave que les ha tenido 8 meses en el hospital con la desesperación y angustia de una familia entregada a la salud de su niña. Tras largas sesiones de quimioterapia y un trasplante de médula anónimo todos están en casa y la salud de Hannah ha mejorado.
Esta angustia vital ha inspirado al padre para crear una maravillosa galería fotográfica perturbadora —a la vez de inspiradora— y que pretende concienciar a la gente para que se convierta en donante de médula. El trabajo lo realizó inicialmente para bromear con miembros de su familia y amigos y así sobrellevar la enfermedad de Hannah:
"Ella tenía un trastorno inmunológico muy raro que se presentó a los 4 meses de edad. Pasamos 8 meses en el hospital hasta tener el trasplante de médula ósea. Ahora que estamos saliendo del aislamiento nos estamos poniendo al día en todo lo que hemos perdido y hacemos cosas divertidas como esta. Es muy divertido." Stephen en reddit.
Stephen ha publicado en Reddit una serie de fotos manipuladas que ha dado la vuelta al mundo. Su hija Hanna posa en situaciones algo embarazosas que provocan agobio a (casi) todos los que las contemplan. Y decimos 'casi' porque la idea era esa, jugar con el límite de la percepción del peligro; más estimulada en aquellos que tienen hijos que en los que ojean diagonalmente las fotografías.
Si eres padre o madre estos montajes te revolverán las tripas o te provocarán el escalofrío de la protección, ese que se activa como un calambre cuando tu niña acerca la mano a un fuego o camina despistada al filo de un precipicio. Es el instinto animal de protección de la descendencia, congénito y que mejora con cada generación.
La galería [con millón y medio de visitas] ha provocado todo tipo de reacciones en los comentarios de la publicación de Reddit —una de las más vistas y votadas del año y con casi 4000 comentarios— Desde los que felicitan al artista por la calidad del trabajo hasta los que le regañan por las reacciones que provoca en la boca del estómago.
Stephen ha comentado activamente el post hablando sobre los detalles de las imágenes. Recuerda que muchas de ellas están llenas de fallos que delatan el montaje. Como la del coche, donde se puede ver el velocímetro a 100 millas por hora pero el cuenta-revoluciones está a cero.
Stephen ha compartido con el mundo su trabajo y solo pide a periodistas y medios que lo replicamos que insistamos en la importancia que tiene ser donante de médula para miles de enfermos. Para combatir esa angustia del espectador de esas fotos pero multiplicada por mil y llena de incertidumbres. Donar es el camino.
Gracias por todo, Stephen
