La tercera generación pequeño Panda 4x4 llega este mes de enero a los concesionarios, un modelo que luce un diseño de lo más atractivo, con paragolpes específicos, pasos de rueda más pronunciados y protecciones metálicas tanto en el frontal como en la zaga que le aportan una personalidad propia respecto al resto de la gama, que conlleva además un pequeño crecimiento en las dimensiones de la carrocería, 3 centímetros de longitud y anchura y 5 de altura, llegando a los 3,69 metros.
Además, su condición de todo terreno se ve reforzada por una altura libre al suelo superior en 5 centímetros y, por supuesto, con el sistema de tracción total, más evolucionado en esta nueva generación. Por dentro, cuenta con elementos distintivos como unos asientos con un diseño específico en tres variantes de color verde, beige y naranja y una consola más alta en el túnel central.
Es el más pequeño 4x4, un modelo que permite moverse en campo con la máxima eficacia
Para moverse en terrenos complicados, el sistema de tracción total permanente incorpora una función denominada «Electronic Locking Differential» que se activa desde un botón situado en el salpicadero y permite frenar las ruedas que no tienen tracción para asegurar el máximo agarre en las que sí tienen. Las suspensiones son similares a las del resto de la gama, aunque en la trasera se han efectuado pequeñas modificaciones para adaptar el sistema de tracción total. Monta además neumáticos de campo con especificaciones M+S y dimensiones 175/65 sobre llantas de 15 pulgadas.
La gama del Panda 4x4 arranca en los 10.500 euros de la versión con motor 0.9 Twin Air, un precio que incluye la campaña promocional de la marca —Bonus Eco Fiat (3.100 euros), Plan PIVE (2.200 euros) y financiación 4x4 (1.000 euros), cuatro años de garantía y de mantenimiento—. Por 600 euros más, la opción Diesel con el motor 1.2 Multijet de 75 CV. También se comercializa la versión Trekking, similar en aspecto al 4x4 pero con tracción delantera y un precio 1.800 euros inferior.