Las exigencias de la Generalitat catalana de mayor financiación e, incluso, independencia podrían añadir nuevas presiones sobre las finanzas españolas y europeas, según JPMorgan.
El banco de inversión estadounidense explica en un informe que el caso catalán puede sentar un precedente para el resto de regiones de Europa que transfieren fondos a zonas más necesitadas.
Es decir, “si Cataluña no está preparada para subsidiar las regiones más pobres de España, ¿por qué deberían estarlo Alemania u otros países del norte?”.
Los analistas de JPMorgan afirman que es probable que el rechazo catalán a las transferencias fiscales se extienda y haya más referendos que cuestionen la solidaridad en toda la zona euro. “Cataluña podría estar simplemente abriendo el camino”, concluyen.
La entidad recuerda que éste fue el caso cuando Europa solicitó ayuda financiera a otros miembros del FMI como por ejemplo China. Entonces los mandatarios del gigante asiático adujeron que si Berlín, que era más rico, no ponía el dinero… ¿Por qué tenían que ponerlo ellos?
En opinión de JPMorgan, Cataluña podría conseguir cambios muy significativos respecto a su relación con España. Si esto sucediese y Barcelona limitase sus entregas monetarias al Estado, las cuentas españolas se resentirían.
Además, abriría la puerta a que otras CCAA ricas pidiesen el mismo trato y el Gobierno central vería socavado el control de las finanzas autonómicas.
El estudio sostiene que no cree que los políticos catalanes quieran la independencia a corto plazo, porque tendrían que "responsabilizarse de la actual crisis" y el nuevo Estado catalán afrontaría un “contexto de financiación incierto”.
A este respecto, subraya que las comunidades precisan la ayuda del Fondo de Liquidez Autonómico: “Los nacionalistas argumentan que están siendo efectivamente rescatados con su propio dinero (aunque hay razones para ser escépticos sobre esta afirmación)”.
Los analistas llegan a la conclusión de que Cataluña no mejoraría su situación fiscal si se independizase.