Momentos complicados los que se viven dentro de las paredes de la sede oficial de MasOrange. Después de muchas negociaciones y de que las relaciones entre sindicatos y la directiva de la compañía estuvieran completamente rotas por las negociaciones y las condiciones del ERE. Finalmente, ambas partes consiguieron llegar a un acuerdo y los plazos se abrieron para que los empleados pudieran adherirse al expediente regulador de empleo.
Durante todas las conversaciones, los sindicatos mostraron un rechazo frontal al ERE propuesto por MasOrange y amenazaron con no volverse a sentarse con la dirección de la operadora. Finalmente, la empresa de telecomunicaciones elevó las indemnizaciones económicas hasta la horquilla de entre 33 y 45 días por año trabajado en el Expediente de Regulación de Empleo y rebajó su afectación en 650 trabajadores. No obstante, los sindicatos no pudieron conseguir uno de los objetivos primordiales para ellos: que las salidas fueran completamente voluntarias.
Cierto es que MasOrange ha dicho por activa y por pasiva que los despidos iban a ser voluntarios. No obstante, si las plazas no se cubrían por completo, la operadora se reservaba el derecho a despedir a aquellos que considerara la empresa. Con este panorama, tan solo UGT votó a favor del acuerdo del ERE, con el rechazo frontal de Comisiones Obreras y de USO. Un hecho que ha provocado la guerra interna entre asociaciones.
Y es que UGT ha lanzado un duro comunicado en el que señala a los otros sindicatos de que sus integrantes se hayan apuntado al ERE que había rechazado hasta el final de las negociaciones. “Traición a la plantilla. Delegados y delegadas de CCOO y USO se apuntan al ERE mientras de boquilla lo rechazan y fuerzan a que nadie se apunte”, indica el comunicado lanzado por parte de Unión General de Trabajadores.
En el escrito remitido a sus trabajadores UGT remarca que “cuatro de los cinco delegados y delegadas con representación en la mesa negociadora del ERE de CCOO se han apuntado. También se apuntan los de USO, los abanderados del sindicalismo, que reparten carnés todos los días”, critican duramente.
El tono del comunicado se recrudece y desde UGT se acusa a CCOO y USO de “llenarse los bolsillos” apuntándose al ERE que había aceptado la propia Unión General de Trabajadores y recuerdan que todos los puntos a los que el sindicato mayoritario accedió, ahora los representantes discordantes los aceptan.
Elecciones sindicales
El fuego cruzado entre representantes sindicales se produce en un momento crucial para el devenir de las organizaciones puesto que ya se preparan las elecciones de representación. No obstante, fuentes internas de la compañía hablan de “hartazgo” por las continuas “disputas entre sindicatos”. “Siempre andan a la gresca por unos motivos u otros, pero cuando verdaderamente hay que dar un paso adelante y luchas no lo hacen. No sorprende a nadie”, se lamentan dichas voces de la compañía.
En este sentido, UGT también reprocha tanto a CCOO como a USO de “incendiar” el período electoral para que “todo salga mal”. “Han aprovechado esto para una cuestión electoral”, se lamentan fuentes del sindicato.
El ERE continúa adelante
En plena batalla sindical, los plazos del ERE fijados continúan ejecutándose, si bien las cifras que maneja la dirección no son los esperados. Tal y como preveían los empleados, las bajas voluntarias iban a ser muy inferiores al número de trabajadores que deben ser despedidos.
En concreto, y como han avanzado los propios sindicatos, solo 199 personas se han apuntado de forma voluntaria. Esta cifra supone que solo se han cubierto el 30% de los empleados que deben abandonar la compañía. Con este panorama, y a falta de un día para que se cumpla el plazo para adherirse de manera voluntaria, MasOrange se vería en la obligación de encontrar al 70% de la cifra estipulada para culminar el ERE.
Conviene recordar que la empresa se reserva el derecho a despedir a los empleados en base a diferentes condicionantes como, la menor polivalencia funcional, formación, capacidad de adaptación, excedentes por área o menor valoración del rendimiento o potencial de desarrollo de la persona trabajadora.
El plazo para inscribirse al despido colectivo se abrió el 22 de octubre, y una vez que concluya este miércoles, la empresa tendrá un periodo del 7 al 13 de noviembre para comunicar si acepta la solicitud de los voluntarios, ya que tiene derecho de veto en determinados casos.