"Pero, por favor, qué cosas", ha respondido el jefe del Ejecutivo, Mariano Rajoy, a los periodistas al ser preguntado si se podría retirar el texto de reforma de la estiba. Rajoy eludía así la pregunta que le hacían los periodistas de los pasillos del Congreso antes de su comparecencia para informar sobre el Consejo Europeo de la semana pasada.
Más explícito ha sido el secretario de Estado de Relaciones con las Cortes. José Luis Ayllón, ha segurado que confía en que "las cosas van a salir bien, seguro". Ayllón ha recalcado que el Gobierno "no tiene intención de retirar nada" en caso de que no haya un acuerdo entre empresarios y trabajadores. "Vamos ganarlo y sacarlo adelante", ha afirmado.
Por su parte, el secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, ha señalado que "es bueno" que pueda haber acuerdo en las cuestiones relacionadas con la estrategia de país, como la defensa de la industria y de los trabajadores. Iglesias ha lamentado que el Gobierno, "con el apoyo de Ciudadanos y PSOE", apueste por "vender" España a los fondos de inversión extranjeros, y ha recalcado que Podemos defenderá siempre los derechos de los trabajadores.
Tanto el portavoz del PSOE, Antonio Hernando, como el líder de Ciudadanos, Albert Rivera, se han mostrado cautos a la espera de la reunión entre la patronal y los sindicatos.
El Ministerio de Fomento ha pedido "responsabilidad" a todos los grupos políticos con presencia en el Congreso de los Diputados para aprobar la reforma de la estiba, que se votará este jueves. El Gobierno insiste en que ha mostrado su disposición a "facilitar el mantenimiento del empleo" y ha instado a trabajadores y empresarios a alcanzar un acuerdo en la negociación colectiva. Además, el Ministerio ha recordado que el real decreto-ley ha de salir adelante de forma obligatoria por mandato de la justicia europea, ya que de lo contrario España debería hacer frente a una multa millonaria.
Previsiblemente la nueva normativa será rechazada en el Parlamento, ya que los grupos del PSOE, Ciudadanos, Unidos Podemos, PDeCAT y Compromís ya han anunciado que votarán en contra.
Este miércoles tendrá lugar una reunión técnica entre patronal y sindicatos, aunque estos últimos han avanzado que no habrá acuerdo esta semana porque el Ministerio de Fomento no está presente en las negociaciones.
