Esta semana, el Partido Popular se ha comprometido con el colectivo de actores a impulsar un estatuto del artista en España que contenga, entre otras cuestiones, la intermitencia en la cotización a la Seguridad Social y el pago trianual del IRPF. Al menos eso dijo el vicesecretario de Sectorial del PP, Javier Maroto, quien recibió a un grupo de representantes de la Unión de Actores, un sector de la cultura duramente golpeado por medidas como el IVA Cultural del 21% que ha afectado al tejido de las artes escénicas.
"Más adelante habrá momento para entrar en la harina del IVA cultural y otros asuntos", aseguró el dirigente del PP.
La conversación, aseguró Maroto, no entraría en temas de fiscalidad. "Más adelante habrá momento para entrar en la harina del IVA cultural y otros asuntos", aseguró el dirigente del PP quien acordó que la reunión se restringí a tratar a las demandas laborales de los actores, para así poder avanzar y llegar a compromisos. El problema radica justamente en el hecho de que, tratándose de un sistema en el que todo guarda relación –producción, público, consumo y taquilla-, semejante razonamiento depende de algunos datos.
A tan sólo a los 4 meses de activación del IVA del 21%, en 2011, las artes escénicas perdieron 1,8 millones de espectadores y un 33% de la recaudación. En el primer semestre de 2013, la Federación Estatal de Asociaciones de Empresas de Teatro y Danza (FAETEDA) se refirió a las “trágicas y devastadoras” consecuencias del “desmesurado aumento” del IVA en las artes escénicas y exigió al Gobierno la revocación inmediata de la medida. Y aunque el organismo dijo haber encontrado “solidaridad y comprensión” entre los responsables del Ministerio de Cultura, señalaron que, si existía un punto de tranca, ése le correspondía a Hacienda.
FAETEDA planteó, en un estudio, que la gravedad de los efectos del IVA del 21% sobre las artes escénicas sería reversible si el Gobierno anula la subida del IVA. Un tipo del 10% de IVA en lugar del 21% lograría la recuperación de 2,5 millones de espectadores, además de una recaudación neta de 53 millones de euros y una recuperación de 1.800 puestos de trabajo (datos para un año natural), además del aumento de los ingresos para las arcas del Estado, en forma de impuestos y cotizaciones. ¿No eran datos a tener en cuenta al momento de ofrecer un estatuto del artista?
El panorama real del sector
Ninguna de aquellas reivindicaciones fueron mencionadas por Maroto en su reunión esta semana con los actores. Llegó a admitir a la Agencia EFE que en el aquel encuentro no se trató con detalle la bajada del IVA cultural porque las partes habían decidido acotar las cuestiones -limitarlas a los derechos que reclaman los actores como trabajadores- para así poder "avanzar".
Entre las medidas que supuestamente apoyaría el PP en su estatuto del actor estaría la de implantar un sistema intermitente de cotización
Entre las medidas que supuestamente apoyaría el PP en su estatuto del actor estaría la de implantar un sistema intermitente de cotización a la Seguridad Social como el que tienen los actores en Francia, y permitir el pago trianual del IRPF -el 60 % un año después, el 30 % el siguiente y el 10 % restante el tercer ejercicio-. Lo mismo ocurre con la fiscalidad, y dado que los actores trabajan de forma intermitente y pueden tener más ingresos unos periodos que otros, el PP ha aceptado su propuesta del pago trianual del IRPF, de forma que el impuesto sobre la renta de un ejercicio fiscal se pague en los tres siguientes, el primero un 60 %, el segundo un 30 % y el tercero el 10 % restante.
Los actores también han pedido a Maroto más facilidades para contar con representación sindical, ya que ahora se necesitan seis meses de antigüedad para ser representante. La idea es que se elija a nivel autonómico, lo que requeriría una modificación parcial del estatuto de los trabajadores. ¿Son suficientes esas medidas? Algunos datos podrían aclarar su qué tan profundo ha sido el gobierno cuando aplica, in extremis esta media.
Los actores también han pedido a Maroto más facilidades para contar con representación sindical
Según el Estudio y diagnóstico sobre la situación sociolaboral de actores y bailarines de España, el 72,9% de los actores españoles no puede vivir exclusivamente de los ingresos que percibe por su actividad empresarial, y el 65% de ellos ni siquiera logra trabajar más allá de tres meses al año.
El informe, elaborado por la Fundación Aisge, Sociedad de Gestión de Derechos de Autor de directores de escena, dobladores, actores y bailarines, mide la situación con respecto al 2012, el año más crítico en el sector, pues estuvo signado por el aumento del IVA cultural hasta el 21%, una medida que hizo mella en la tejido de compañías teatrales y artísticas.
De las 1.201 encuestas pormenorizadas realizadas a intérpretes repartidos por todo el territorio nacional -639 hombres y 562 mujeres-, se desprende que sólo el 27% reconoce haber contado con empleo "suficiente" en los últimos quince años.
El 55% de los actores y bailarines no alcanzan el salario mínimo interprofesional (645,30 euros mensuales) con sus trabajos en el sector, por lo que, según el estudio, sin ingresos de otra índole, estos profesionales se encuadrarían "por debajo del umbral de la pobreza".
El 55% de los actores no alcanzan el salario mínimo interprofesional. Sin ingresos de otra índole, estos profesionales se encuadrarían "por debajo del umbral de la pobreza".
Según el estudio, de entre los trabajadores en paro en el momento de realizar la consulta, un 28% no recibía ningún tipo de prestación, y el 15% de ellos carecía de cualquier ingreso propio. Llegados a la edad de jubilación, el 42% se acoge a ella a los 65 años, y en el 34% de los casos reconocen hacerlo "por necesidad", al no haber encontrado oportunidades laborales para
En el lado contrario, un 19% de artistas se mantienen en activo después de los 65 años, porque cuentan con "buenas perspectivas laborales". Según la encuesta, realizada entre 729 actores, 356 actores de voz (dobladores) y 117 bailarines, "las incertidumbres propias" del oficio interpretativo "se han agravado sensiblemente" con la crisis económica, y los actores tienen "menos oportunidades" de trabajar y, cuando lo logran, suele ser "en peores condiciones" que en años precedentes.
Los artistas jubilados españoles han cotizado una media de 28 años, y el importe medio de sus pensiones es de 919 euros, aunque la diferencia entre sexos es significativa: 994 euros para los varones y solo 778 euros para las mujeres. Además, se amplia la horquilla entre los que más y los que menos ingresos perciben por jubilación, de forma que a un 21% les queda una jubilación superior a los 1.200 euros, mientras que un 16% cobra menos de 400 euros mensuales.
El 6% de los encuestados manifestó trabajar sin ningún tipo de contrato.
Respecto a las condiciones de trabajo de los profesionales de la interpretación, aunque la situación no se considera mala en términos absolutos, "abundan las condiciones abusivas": mientras que un 87% trabaja habitualmente con un contrato de por medio, un 6% de empleados no tiene ningún tipo de contratación.
En cuanto a la duración de la jornada, no se respetan los máximos del convenio de televisión en el 27% de los casos, y las cantidades percibidas por los trabajos artísticos en el 13% de los casos son inferiores "a los mínimos estipulados". Además, el 23% denuncia "problemas habituales" a la hora de conseguir que la empresa le inscriba de alta en la Seguridad Social, algo que el 7% "nunca" ha conseguido.
