Son 42 millones de euros y está previsto que su pago se apruebe en el consejo de ministros de este viernes, así lo anunció el ministro de Educación, Cultura y Deportes este miércoles en el Congreso. Se trata de las ayudas a la amortización de largometrajes correspondientes a 2012 y que se concede a aquellas películas estrenadas durante el año 2010.
Wert ha precisado que está pendiente el dictamen del Consejo de Estado sobre la inclusión de un suplemento de crédito que permita hacer frente a esas obligaciones pendientes de pago y que la previsión del Gobierno es que "el Consejo de Ministros pueda aprobarlo este viernes". La afirmación fue hecha en el pleno del Congreso ante una interpelación urgente del Grupo Parlamentario Catalán (Convergència i Unió), sobre la necesidad de adoptar políticas ambiciosas de apoyo a la actividad del sector cinematográfico.
Las ayudas a la amortización de películas se pagan dos años después del estreno, en función de criterios como los resultados de taquilla, la recepción por los espectadores a través de otros medios de difusión o las operaciones de venta remuneradas a precio de mercado de la película. En ese sentido, el Gobierno afirmó en octubre de 2013 que el pago de esas ayudas y las de 2011 se producirían "pronto".
En febrero de 2014 se aprobó el pago de 22,5 millones de euros correspondientes al último trimestre de 2011 y queda pendiente lo relativo a 2012, una cifra que según los productores es de 42 millones de euros.El monto total presupuestado para 2014 en el Fondo de Protección a la Cinematografía -que incluye todas las subvenciones- no alcanza a cubrir esa cantidad, pues suma 33,7 millones, un 13,8 % menos que en 2013. De ahí la necesidad de un suplemento de crédito.
La diputada Montserrat Surroca i Comas ha afirmado que "la industria del cine está en una situación crítica" y que "lleva años soportando las políticas erráticas de este Gobierno y de otros". Wert ha reconocido que la industria cinematográfica "está pasando momentos difíciles", aunque argumentó algunas razones adicionales que, a su juicio, explican la situación. "Es verdad que hay empresas que han desaparecido, el sector de la distribución y exhibición está viviendo momentos delicados", ha precisado el ministro, para agregar luego que semejante cambio "exige una transformación del modelo de negocio que al final genera una geometría de ganadores y perdedores".
Wert ha querido restar dramatismo a los datos ofrecidos por Surroca i Comas sobre el cine español en 2013: una caída de la taquilla del 20%; un 28% por ciento menos de rodajes y un 24% menos de estrenos, además del cierre de más de 400 salas. Según Wert, la cuota de pantalla del cine español en términos de recaudación ha crecido hasta el 24,4 por ciento en los ocho primeros meses de este año, mientras que en espectadores el aumento ha sido del 24,7. El ministro también ha señalado que el objetivo del Gobierno es ser capaz "de transformar un sistema cuyas deficiencias se han puesto de manifiesto en el curso de su aplicación".
Surroca i Comas ha insistido en la necesidad de bajar el IVA cultural para que el tipo impositivo se acerque al de países de nuestro entorno, en que se apruebe la Ley de Patrocinio y mecenazgo y en que se respete el acuerdo que se logró entre Gobierno y sector para que las deducciones fiscales por inversiones en el cine alcanzaran el 30 por ciento. La reforma fiscal recientemente aprobada situó estas deducciones en el 20% para el primer millón de euros y el 18 % -cifra actual- para el resto.
