Esta semana, Empar Moliner (1966) no es periodista ni siquiera escritora. Es un dolor de cabeza. Al menos para los responsables de TV3 que vieron, atónitos, cómo la periodista quemaba un ejemplar de la Constitución española ante las cámaras de la televisión autonómica. Lo hizo el lunes de esta semana en el programa matutino ‘Els matins’. Para cortar por lo sano, la cadena pública retiró el vídeo de su web y el Consell Audiovisual de Catalunya (CAC) ha anunciado que actuará de oficio y analizará lo ocurrido. La propia Empar Moliner ya se ha disculpado este miércoles en el programa.
Es de sobra conocida la militancia de Empar Moliner en la defensa del catalán como lengua, así como sus simpatías por la causa nacionalista e independentista. Aunque no ha terminado de dar un paso al frente en la materia, Empar Moliner sí ha coqueteado con el asunto. En el año 2015 comunicó que no se uniría a la lista unitaria de Junts pel sí por ser "incompatible" con su trabajo. Así lo hizo saber en su cuenta de Twitter el 15 de agosto de ese año, cuatro días después de que aceptara su incorporación a la misma.
Este miércoles, justo 48 horas después de prender fuego a la Constitución española, Moliner se disculpó. El acto de contrición produjo más escozor. “Protestaba por una cosa que me destroza por dentro, la prohibición del decreto de pobreza energética. Dicen que he quemado la Constitución, y de hecho, la misma Constitución lo permite. Era una forma teatral de protestar”, dijo, pero no sin añadir algunas cosas. "Si hubiera pensado en todo el ruido que se ha generado por mi protesta, quizá no lo habría hecho", a la par que añadía: "¿Qué es más importante, la Constitución o la gente que no tiene luz? Yo no me siento representada por este libro".
En una entrevista concedida a Catalunya Ràdio, la escritora ha insistido en que "la Constitución es ahora, en los medios de comunicación, como la Familia Real en los años 90, cuando no se podía bromear sobre ella". Incluso aseguró, como ha dicho en más de una ocasión, que la dirección de TV-3 no piensa como ella. Pero eso le da igual. "Lo lamento, pero tengo el deber de denunciar la injusticia. Es un deber de los escritores, de los payasos, y de los escritores payasos", ha rematado, en referencia a ella misma. Ya desde el sábado 9 de abril, la periodista había expresado su sorpresa y dudas en la validez de una Constitución que no resguardaba los derechos de las familias.
El TC prohíbe al gobierno catalán no cortar el suministro a familias con pocos recursos pq es "Inconstitucional". ¿Para qué la Constitución?
— Empar Moliner (@emparmoliner) April 9, 2016
Conseguirla en estos días no es tarea fácil. Sin embargo, en las pesquisas es posible trazar un perfil de la escritora y periodista. La mayoría de las personas consultadas -tanto en el mundo editorial como en los medios de comunicación- reconocen en ella a una militante comprometida con las reivindicaciones lingüísticas del catalán. Apenas un año atrás, el periodista Joaquim Roglan, colaborador de La Vanguardia, trató a Moliner de actriz y cabaretera: "Encaja más en Sálvame", vino a decir. Sus palabras surgieron a raíz de unas declaraciones de la periodista en las que criticaba esta cabecera.
El periodista de La Vanguardia, Joaquim Roglam, dijo que Moliner encajaba más en Sálvame que en TV3
Cercana a autores como Quim Monzó o Sergi Pàmies, Moliner ha desarrollado una obra en la que ha publicado tanto libros de periodismo como de ficción. Empar Moliner ha sido una activa defensora del catalán como lengua, aunque también es cierto que jamás le ha hecho ascos a la publicación en castellano. Con el sello Espasa publicó su novela La Colaboradora (2012), traducida del catalán al castellano en el sello Espasa. En este libro hace gala de lo que para muchos es su seña de identidad: la sátira y la ironía.
Ambos rasgos forman parte de sus tres libros publicados con Acantilado, un sello prescriptor y de altísimo prestigio literario. Los dos primeros, los volúmenes de relatos No hay terceras personas (2010) y Te quiero si he bebido (2004), seleccionado en 2004 por La Vanguardia y El País como uno de los libros del año. A ese suma Busco señor para amistad y lo que surja. Se trata de cuarenta crónicas en las que se unen un adivino para averiguar la supervivencia de la lengua catalana, la visita a un convento donde se alquilan empleadas latinoamericanas, un almuerzo en un comedor social o la contratación de un refugio atómico. Nuevamente, el humor es su señal… El humor y la militancia, que ha crecido con el paso de los años.
Aunque suele expresarse públicamente en castellano y catalán, Moliner es mucho menos conocida por sus libros en castellano. En catalán ha publicado L’ensenyador de pisos que odiava els mims, Feli, esthéticienne (Premio Josep Pla, 2000), T’estimo si he begut (Quaderns Crema, 2004, premio Lletra d’Or, 2005), Busco senyor per amistat i el que sorgeixi (Quaderns Crema, 2005) y ¿Desitja guardar els canvis? (Quaderns Crema, 2006). Es una defensora de que la lengua catalana no es minoritaria sino minorizada. Ha colaborado en El País y en programas de radio como El matí de Catalunya Ràdio o Minoria absoluta, además de colaborar en Els matins (TV3), el programa donde ha hecho su polémica puesta en escena al quemar la Constitución. Actualmente colabora con el diario Ara, en TV3 y en Catalunya Ràdio.
Moliner simpatiza con el secesionismo, tema en el que también se ha posicionado. Así ocurrió en 2015 con sus declaraciones respecto de la independencia de Cataluña, pronunciadas en un vídeo de la campaña 'Catalan Weekend', con la que Òmnium Cultural pretende dar a conocer los objetivos independentistas en el panorama internacional. En unas palabras en las que echaba mano del humor y el sarcasmo, Moliner dijo: "La independencia es elegir la hora a la que haces el amor y con quién". En dicho vídeo promocional, Moliner mantiene una conversación con un periodista británico. "¿Por qué escribes en una lengua minoritaria como el catalán?", preguntó el reportero, ante lo que Moliner responde: "Minoritaria no, minorizada". Es "por lo mismo que usted escribe en inglés en su diario".