No hubo una reacción homogénea en el sector cultural durante la jornada del 14N. Mientras los museos de la capital mostraron una escasa respuesta a la convocatoria de la huelga general, instituciones en Cataluña y otras zonas del país sí mostraron una respuesta algo más visible, a juzgar por los datos recabados durante el día de ayer.
Mientras instituciones como el Museo del Prado abrieron sus puertas sin ningún contratiempo, otras como el Museo de Arte Contemporáneo de Barcelona mantuvieron sus puertas cerradas al público debido a la falta de personal. Existieron otros casos, como el del Museo Reina Sofía, en Madrid, el cual vio mínimamente entorpecida su actividad con el cierre de una exposición temporal (Perder la forma humana. Una imagen sísmica de los años ochenta en América Latina) y dos de las salas de su colección permanente, a causa del 30% del seguimiento de la huelga entre sus trabajadores.
Organismos privados como el Museo Thyssen trabajaron a pleno rendimiento -exceptu su servicio de Tienda- al igual que la Fundación Mapfre, que acoge actualmente la muestra sobre Jean Paul Gaultier, y Caixaforum Madrid (que presenta la exposición Torres y rascacielos), que también mantuvieron las puertas abiertas a los visitantes durante todo el día.
Monumentos como La Alhambra no ofrecieron sus servicios al público debido al seguimiento de la huelga que hicieron sus trabajadores en un 66%. En Málaga, el Museo Picasso se vio desigualmente afectado por la convocatoria. El público pudo visitar la colección permanente, pero no así la exposición temporal. En Sevilla, el Museo de Bellas Artes no abrió, mientras el Museo Arqueológico y el Museo de Artes y Costumbres permanecieron abiertos todo el día.
En el campo del cine y el teatro, la huelga general sí tuvo consecuencias directas. La práctica totalidad de los teatros de Madrid suspendieron sus representaciones. Lo mismo ocurrió con todos los rodajes que se llevan a cabo en la capital, según la Coordinadora de Trabajadores del Espectáculo (CTE). La CTE asegura que con motivo de la huelga se suspendieron los rodajes de las series Aída, Con el culo al aire, El secreto de Puente Viejo, Érase una vez, Amar en tiempos revueltos y Cuéntame cómo pasó. También han parado los rodajes de los largometrajes Las brujas de Zugarramundi, dirigido por Alex de la Iglesia -el mismo cineasta lo comunicó por Twitter- y producida por Enrique Cerezo, y el de Combustion, de Daniel Calparsoro y producida por Antena 3 y Zeta Cinema.
Los trabajadores de los teatros de Madrid secundaron la huelga y todos suspendieron sus funciones, a excepción del Lope de Vega, donde se representa el musical El Rey León. Los teatros que se sumaron a la huelga, según la CTE, fueron: Bellas Artes, Caser Calderón, Coliseum, Español, Fígaro-Adolfo Marsillach, Galileo, Infanta Isabel, La Latina, Maravillas, Marquina, Muñoz Seca, Naves del Español, Pavón, Príncipe, Reina Victoria, Rialto, Artespacio Plot Point, Microteatro por dinero, Se abre el Telón, Nudo Teatro, Abadía, Alcázar, Amaya, Fernán Gómez, Lara, María Guerrero y Valle-Inclán.
"Un entierro" para la cultura
Más de una veintena de artistas encabezados por Willy Toledo se mantuvieron encerrados en el teatro Español como medida de protesta. Sólo abandonaron la toma del coliseo ubicado en la Plaza Santa Ana para dirigirse a otra concentración prevista frente a la sede de la Secretaría de Cultura, en la Plaza del Rey, junto a otros profesionales del mundo de la Cultura, a partir de las 17 horas. La concentración volvió a solicitar la dimisión del ministro José Ignacio Wert y del Secretario de Cultura José María Lassalle. Los congregados en la plaza coreaban que la cultura no es un lujo y, haciendo un juego de palabras, se referían al ministro de Educación y Cultura como "sin-Wert-güenza".
Desde la madrileña Plaza del Rey, un numerosísimo grupo de personas llegó, otra vez, a la Plaza de Santa Ana, donde se sitúa este teatro municipal, el más antiguo de Madrid. Allí fueron recibidos con aplausos desde el balcón del que colgaba una gran pancarta que decía: "Trabajadores del Español en Huelga General". Allí, ataúdes, plañideras, globos negros y un muñeco gigante negro con el cartel "to be or not to be", simbolizaron el "entierro" del sector cultural.
Los congregados solicitaron la derogación del IVA del 21% a los productos culturales y afirmaron el éxito de la convocatoria de la huelga en el sector, el cual fue, según la Coordinadora de Trabajadores del Espectáculo, de un 99%. Entre los manifestantes han acudido a la protesta personas del mundo del cine y el teatro como Pilar Bardem, Carlos Bardem o Itziar Miranda.