En las últimas 48 horas cualquier persona atenta a las redes sociales puede haberse cruzado con un seguidor de Rosalía confuso, estresado o enfadado por el proceso de preventa de los conciertos de cierre de la gira de ‘El Mal Querer’, que se celebran en Barcelona el 7 de diciembre y en Madrid el día 10. Tras anunciarse las actuaciones se activó un tenso proceso de ‘preventa’, que provocó la ansiedad de los interesados en ver a la estrella catalana. El resultado fue frustrante: atascos en el acceso, intentos fallidos de adquisición e incluso compra de asientos no deseados por si no estaban disponibles los preferidos.
https://twitter.com/Larosaliabajal1/status/1174251675948855297?ref_src=twsrc%5Etfw
Una llamada a las oficinas de Live Nation en Barcelona aclara la posición de la empresa promotora. “Lo ocurrido en la preventa nos ha parecido normal, siempre pasan estas cosas en giras con mucha demanda. Un problema es que hay mucha gente que no conoce como funciona todo esto. Si pinchas en dos asientos y te aparece el cartel ‘localidades agotadas’ no significa que el aforo está vendido, sino que puede haber otra persona que ha llegado antes que tú a esos mismos asientos. Es un sistema que se llama Microflex y que mejora el anterior que se utilizaba, ya que este te dejaba en una cola virtual durante horas”, aclara una responsable de prensa.
Un minuto después de que apareciese el cartel de “entradas agotadas” se podían encontrar disponibles en páginas webs de reventa como Stubhub, con precios inflados
La empresa Ticketmaster, propiedad de Live Nation, tiene en su web oficial una sección (https://www.ticketmaster.es/help/eventos-alta-demanda/) de consejos para eventos de alta demanda, que puede facilitar apañarse en los atascos. Algunos usuarios denuncian que un minuto después de que apareciese el cartel de “entradas agotadas” a miles de seguidores de Rosalía, se podían encontrar disponibles en páginas webs de reventa como Stubhub, con precios inflados. Por ejemplo, una entrada de pista podía dispararse de 43 euros más 5,50 de gastos de gestión hasta 98 euros.
https://twitter.com/TCejohierro/status/1174241987324784640?ref_src=twsrc%5Etfw
Compras sospechosas
Resulta lógico que los fans que han sido incapaces de conseguir una entrada estando atentos desde el minuto uno se enfaden de que una empresa haya conseguido decenas de boletos y las pongan a la venta justo minutos después de adquirirlas. “Ticketmaster realiza luego investigaciones sobre las compras sospechosas y puede llegar a anular ciertas ventas y volver a poner las entradas den el mercado”, aseguran en Live Nation.
Concierto Rosalía
10:00h click al botón de comprar entradas
10:01h entradas seleccionadas y cola virtual
10:01:01h entradas no disponibles pic.twitter.com/EKTjAVX5Y8— Hannah Her (@Hannih_hp) September 18, 2019
La preventa es un proceso que beneficia principalmente a Live Nation, promotora responsable de los conciertos. Con esta práctica consigue que los seguidores más entregados estén registrados en su web y formen parte de sus bases de datos. Además, se generan titulares del tipo “Rosalía agota la preventa en minutos” y otros similares. En realidad, como confirman desde la propia Live Nation, las entradas en preventa de de Madrid se terminaron el miércoles por la tarde y la de Barcelona lo hicieron el jueves alrededor de las once.
Tiene más eco mediático la venta de dos mil entradas de Rosalía que dos Santi Jordi clubs y dos Palacios de los Deportes enteros vendidos por Leiva
La realidad de la preventa es que solo se han terminado 1.000 de las 15.000 localidades que tienen este tipo de recintos. El impacto en prensa digital sirve a Live Nation para ahorrarse dinero en la campaña de promoción. ¿Cómo es posible que tenga más eco periodístico la venta de dos mil entradas de Rosalía que el hecho de que Leiva haya llenado dos veces este año el Palacio de Deportes de Madrid y otras dos en el Sant Jordi Club de Barcelona? Aquí la distorsión viene de parte de los medios de comunicación, no de la promotora. El viernes 20 salen a la venta las entradas generales de estos dos conciertos.
Círculo dorado
Otro problema adicional es el Golden Circle, expresión anglosajona traducible como “círculo dorado”. Designa el espacio más cercano al escenario y el más codiciado por los devotos (valorado en esta gira como 65 más 8,50 en gastos de gestión). Esta práctica, muy cuestionada en el mundo de la música, reserva las mejores zonas de un recinto para las personas con más poder adquisitivo, en detrimento de los seguidores que han hecho cola durante más tiempo. "Esto lo negocia cada artista con el promotor. Unos deciden hacerlo y otros no", señalan desde Live Nation. Como comentaba un usuario en Twitter, con el alias de @criadoelenterado, canciones como “Dios nos libre del dinero” muestran una Rosalía que presume de no tener los beneficios económicos como su máxima prioridad. El problema, piden objetar los escépticos, es que gran parte de su carrera desmiente esta premisa.
https://youtube.com/watch?v=-Uhq5KZntq8