El aclamado director francés Robert Guédiguian vuelve a aferrarse a su cine combativo y comprometido con Mali twist, un drama romántico ambientado en el África poscolonial de los años 60 con el que participó en la pasada edición de la Seminci de Valladolid. A diferencia de sus anteriores trabajos, en esta ocasión asume el reto de viajar al pasado para entender el presente y abordarlo, tal y como él mismo ha explicado con motivo del estreno este viernes en los cines españoles de esta película, en la que desarrolla una historia de amor en un país dividido entre la tradición y la revolución.
"Cuando se trabaja en una película histórica, de época, no es para hablar del pasado, sino siempre del presente a través de lo ocurrido en otro tiempo. Lo que haces es analizarlo para ponerlo en valor hoy y que sea útil en la actualidad", ha señalado a Vozpópuli el cineasta. En su nueva película, explora la historia de Mali a partir de la relación entre Samba y Lara: él, un joven socialista, ella, una joven que huye con él de la ciudad para escapar de un matrimonio forzado.
La historia de este chico "idealista" que sueña con un "África unida y socialista", pero que "también baila el twist cada noche, que se enamora y quiere pasárselo bien" está "muy cerca" del joven que el director era a su edad. "Al tratarse de una historia tan sencilla y tan cercana, me permitió recordar ese internacionalismo proletario en el que todos creíamos en la época", cuenta Robert Guediguian.
En este sentido, el realizador defiende que las preocupaciones que tenía a sus "veintipico años eran las mismas que posee este joven en la misma época pero en Mali", un ejemplo con el que quiere responder al estado de las cosas en Francia, donde cree que "se intenta fragmentar a las personas por razones falsas y ficticias".
Recientemente, el cineasta francés Jean Jacques Annaud dijo a este medio en una entrevista realizada apenas unos días antes de las elecciones presidenciales francesas que la izquierda había "perdido el norte". Tras los resultados de las legislativas y del anuncio de la moción de censura de Melenchón contra Macron, Guediguian cree que "la izquierda ha vuelto a encontrar el norte".
"La izquierda solo funciona si está unida, solo así podemos llegar a triunfar, y esto ocurre no solo en Francia sino en cualquier otro país. La izquierda no puede disgregarse, esto se sabe desde 1923 en Francia, desde la primera victoria de la izquierda, que ganó porque estaba unida, y siempre que ha vuelto a vencer ha sido por presentar programas en común. Puede hablarse ahora mismo de un renacimiento de la izquierda", opina el cineasta.
Robert Guédiguian y su compromiso
Robert Guédiguian nació en el barrio de l'Estaque, en Marsella, en 1953, lugar que le ha servido como escenario de muchos de sus trabajos, en los que mantiene un compromiso con las clases más desfavorecidas. "Todas mis películas se meten con el capitalismo de forma permanente. Es la manera de mostrar la posibilidad de una nueva sociedad socialista, la única solución que existe hoy en día", opina el director francés.
En esta línea, pone como ejemplo la salud pública en Francia, que a su juicio "funciona diez veces peor que hace 10 o 15 años" porque "la privatización se nota cada vez más". "No es verdad que la competencia haga que los cuidados sean mejores, es totalmente falso. Es cierto que un buen sistema de salud pública cuesta caro, pero no falta el dinero, está en los bolsillos de los ricos, por lo tanto, más impuestos a ciertas personas", agrega el director.