La cinta llevaba en la nevera desde 2018, pero ha resucitado tres años después, más fresca que una lechuga. Bastó una recomendación en video de Mel Gibson, difundida por las redes sociales, para que acudieran a verla un millón de personas. Se titula Sound of freedom y trata sobre el tráfico de personas, en muchos casos menores. La cinta se articula en torno a la vida de Tim Ballard, un agente de seguridad nacional de Estados Unidos que decidió consagrarse a evitar que las personas sigan siendo tratadas como mercancías en el siglo XXI.
No hablamos de un personaje de ficción, sino de un profesional real que fundó la organización Operation Underground Railroad. Se calcula que, hasta ahora, han contribuido a rescatar a miles de víctimas y a encarcelar a 750 traficantes de personas. Su trabajo ha sido comparado con las organizaciones clandestina que ayudaban a los esclavos afroamericanos a huir del sur de Estados Unidos en los años de la esclavitud. La película ha recibido una lluvia de elogios, pero también de acusaciones de connivencia con la red conspiracionista QAnon, considerada un brazo cultural informal del trumpismo.
Al menos una de las polémicas que rodea a la película debería ser debatible con limpieza. Me refiero a que estamos ante la única cinta capaz de plantar cara en taquilla a un fenómeno de décadas como la franquicia de Indiana Jones. La mala fe con la que se analiza esta pugna es evidente, basta leer este fragmento del diario progresista británico The Guardian: “El éxito de Sound of freedoom solo ha logrado un momento fugaz, durante su estreno el pasado 4 de julio, cuando probablemente la audiencia natural de Indy estaba más ocupada en planes típicos de este día festivo, pasando tiempo con amigos en barbacoas y otras actividades sociales, mientras una base de fans sin este tipo de ocupaciones, animados por el protagonista de la cinta, Jim Caviezel, proclamaban que en su primer fin de semana se habían ingresado 14.2 millones de dólares frente a los 11.7 millones de la película de Harrison Ford”, explica el rotativo. ¿De verdad se puede desacreditar el éxito de una película alegando que se conoce (sin aportar datos) la falta de relaciones sociales de quienes van a verla?
'El sonido de la libertad': un éxito popular
También se ha intentado desacreditar a la película alegando que se financia a través del micromecenazgo, lo que permite a una sola persona con dinero comparar múltiples entradas. Se olvida que, a la hora de valorar el éxito de una empresa, lo que cuenta es su capacidad para recaudar, no si se hace de manera individual o colectiva. El estreno también ha recogido la hostilidad que despierta entre la filas progresistas Jim Caviezel, el intenso y talentoso actor de La Pasión de Cristo, conocido por su compromiso con las ideas conservadoras. La mayor parte de la promoción de la película se ha hecho en espacios ajenos al progresismo de Hollywood, por ejemplo el programa The war room de Steve Bannon, uno de los artífices de la estrategia que llevó a Donald Trump a la La Casa Blanca.
Estados Unidos es el consumidor número uno de sexo con niños en el mundo; número uno también consumidor de drogas y consumidor de pornografía infantil
Lo que no puede negarse es que El sonido de la libertad es un éxito rotundo. La obra contaba con un presupuesto de 14 millones y medio de dólares y en solo una semana alcanzó los 40 millones de dólares. Toda una hazaña en un contexto donde los taquillazos de Hollywood cotizan a la baja, en pleno debate sobre los enfoques woke, acogidos al principio con máximo entusiasmo por la meca del cine pero ahora cuestionados por sus pobres resultados de taquilla. Se ha intentado menospreciar el éxito de la cinta, dirigida por el mexicano Alejandro Gómez Monteverde, alegando que es un producto de nicho para paletos de la América profunda y adictos a las teorías de la conspiración, pero el alcance de su éxito cuestiona la afirmación, igual que las cifras de voto a Donald Trump cuestionan que su base social sea tan estrecha como dicen sus rivales progresistas.
El mexicano Eduardo Verástegui, actor y productor del filme, explicó así su implicación en el proyecto a la versión en español de la revista People: “Le he puesto ocho años de mi vida. Estamos hablando del tráfico de niños para explotación sexual, un problema global, principalmente entre Estados Unidos y México. Estados Unidos es el consumidor número uno de sexo con niños en el mundo. Número uno también consumidor de drogas y consumidor de pornografía infantil, y México por su cercanía, es el proveedor número uno. Como mexicano, cuando te enteras de estas cosas, ya no puedes voltear hacia otro lado. Ya no puedes quedarte cruzado de brazos ni callado porque el silencio estimula al verdugo".
La cinta, además, cumple con una promesa que se hizo a sí mismo. "Desde hace 20 años hice este compromiso, esta promesa que le hice a Dios y a mis padres de usar mi vida, los talentos, todo lo que soy, en proyectos que tengan el potencial de entretener a la audiencia, pero también de hacer una diferencia en la vida de los demás porque el arte tiene ese poder”, explica el intérprete de 49 años.
Samurai Jack
A Monica PEDOltra no le ha gustado...
Termopidas
Casi todo es posible, en esta política de saldos...Feijoo debe intentarlo y Vox no poner palos en las ruedas...Hay que acorralar a Sánchez...4 años más, con todo el poder en manos del sanchismo,seria un desastre para todo el país..
KVLT
Me alegra de que por fin se empiece a hablar de esta película. No sólo es un exito en USA: en el Filmaffinitty (en) español lleva varios días como la más visitada. QAnon es un espantajo absurdo que ha llevado al wokerío a satanizar 4chan (uno de los espacios más caóticos, creativos y libertarios que todavía quedan en internet) y a la pobre rana Pepe. Si uno le quita los aspectos más ridículos, lo que queda se parece mucho al escándalo del suicidable (aceptemos pulpo) Jeffrey Epstein y sus islas privadas del bunga-bunga, por el que su pareja Ghislaine Maxwell cumple una sentencia de 20 años por abuso sexual y trata de blancas que le endilgó un juzgado de Nueva York, y que salpica a medio Washington y a medio Hollywood. Normal que rabien.
Sin_Perdon
Me alegro de que Victor haga una crítica justa donde no se denigra esta película porque destapa cosas que la izquierda woke no quiere que la gente sepa. Aunque echo en falta algunos detalles, de como Disney (esa antigua marca antes al servicio de las familias y ahora de la degeneración moral) la tuvo aparcada durante tres años. De como ninguna distribuidora apostaba un duro diciendo que no interesaba o que no sería rentable (a estas alturas va por encima de los 87MM de dólares cuando costó apenas 15MM) o de como ha sido atacada por el estalishment progre estadounidense simplemente porque cuenta cosas que no quieren que se cuenten. La crítica especializada en Rotten Tomatoes le daba un 75%, la popular un 99%, pero ahí siguen graznando que es una cinta para negacionistas y gente atrasada. Ya sabemos como trata la izquierda woke a todo lo que no se postra ante ellos. Seguimos en guerra.
Samurai Jack
Como se nota que LA VERDAD pone nerviosos a los que tienen que temerla... Como se nota... ¿Eh pedos? La cosecha llega...
Antonio Rosa Heredia
Existe la posibilidad cierta de que Iceta la vete por fascista. Si no lo hace él por tema de fechas, es posible que lo haga el nuevo titular de su ministerio, Cultura y Deporte, puesto por FeiJOY - si es que decide cambiar a Iceta -.
Clearco
Pienso verla. Aunque en "Uropa" los traficantes de personas no existen. Es como en España los jueces corruptos. O fiscales. Me explico: en "Uropa" salen cayucos, autogestionados por los dignos migrantes que los abarrotan y, ellos mismos tras recorrer cientos de kilometros ya sea desde Mauritania o Argelia, son "casualmente" avistados en el ancho mar por ONG's dedicadas al negoc... dedicadas a la noble causa y mostradas en los telediarios mientras comes. ¿Hay algo mas democrático?. Pero traficantes de carne humana en "Uropa"????!!!!. Esos son cosas de la derecha extrema. Y de Trump. Es como si invitáramos a la nº 3 del cartel de los Soles, que no puede pisar suelo "uropeo", a la cumbre UE-HispanoAmerica y que el presidente de turno la reciba con dos besos. Estas cosas en "Uropa" no ocurren. (Yo, debería haber tenido estómago y ser progre)
Chus
QUE CINISMO!!! Mientras censurais la ESCLAVITUD EN HUELVA (que se extiende ya a muchos lugares de España y Europa), denunciais la Censura para los que hablan Y PRUEBAN la existencia de esclavitud en España. Esclavitud en Huelva de la que si se hablaba en la prensa cuando no existían Pruebas. Ahora que las hay, se impone censurar la esclavitud y, sobre todo, las Pruebas Documentales Públicas. Censuráis hasta el texto de las Leyes. CÍNICOS
vallecas
El wokismo, el falso progresismo, el activismo político, los periodistas a sueldo, las cuotas por genero o raza. Todo va a implosionar porque va contra la verdad, necesita el subterfugio para existir. La injusticia se combate con justicia, no con injusticia de distinto signo. ¿si un negro quiere ser tratado como cualquiera sin mirar el color de su piel, por qué acepta beneficios por el color de su piel? La injusticia no beneficia a nadie, especialmente a los colectivos a los que se quiere beneficiar. La injusticia provoca odio.
neike2121
Pues no, si se abstienen estarian dando una patada al tablero y harían imposible seguir negociando.
Uno cualquiera
Sabremos que la cinta ha sido un éxito en España cuando los sojas de la SER y los feligreses de canal Red empiecen a supurar bilis y a relacionarla con Vox. Atentos a las contorsiones mentales, siempre son divertidas. Lean este comentario en unos días, un saludo.